martes, 26 de mayo de 2009

SI ME PEGAS....ME EXCITO

cortesia tVa.com.mx

Ser golpeado, observar imágenes sexuales, vestirse con ropa del sexo opuesto, son sólo algunas de las distintas expresiones comportamentales de la sexualidad

En la sexualidad incluyen infinidad de acciones, expresiones y emociones que se dan en algunas personas o parejas; muchas se desconocen, otras mas bien no son practicadas; hasta 1985, algunas eran llamadas "parafilias", pero el Instituto Mexicano de Sexología las nombró expresiones comportamentales de la sexualidad.

Sigmund Freud contemplaba bajo el término de perversiones, todos los comportamientos sexuales que desviaban el objeto de la sexualidad así como su fin. Para Freud, la sexualidad debía de tener por objetivo el intercambio de fluidos entre dos adultos, hombre y mujer. Aceptó que hubiera juegos previos de tipo "perverso", pero siempre y cuando no sustituyeran al coito.

Ésa es una de las razones por las que este tipo de expresiones, antes llamadas "parafilias", que desvían la finalidad del coito, como el voyeurismo, o bien los que desvían el objeto, como la zoofilia, eran consideradas perversas; de ahí la connotación de pervertido a la persona que tiene preferencias sexuales "anómalas" o "anormales".

César Pérez, sexólogo y psicoterapeuta del Imesex, comenta: "Estas expresiones forman parte de las personas y cada uno decide si le gusta alguna, si la practica y la comparte; no tienen nada que ver con la orientación sexual, ni son malas o dañinas, a menos que sean expresadas erróneamente o a la fuerza."

En algunas sociedades, la mayoría no son aceptadas por considerar que atentan a las buenas costumbres y porque algunas requieren o contemplan actos que no son bien vistos y que incluyen a terceras personas. Por otro lado, hay quien las practica y no sabe cómo se llaman, pues es curioso que hasta lo más común es una expresión comportamental de la sexualidad.

Las más comunes:

Sadismo: Expresión comportamental de la sexualidad en la que los individuos gustan de infligir dolor físico, someter, vejar o hacer que otros dependan de ellos.

Masoquismo: Expresión comportamental de la sexualidad en que la persona gusta del dolor físico, de la sumisión, de la vejación e incluso de la dependencia marcada de otra persona.

Pedofilia: Expresión comportamental de la sexualidad que consiste en el gusto o la atracción hacia personas que se encuentren en la niñez o notablemente menores.

Fetichismo: Expresión comportamental de la sexualidad mediante la cual se gusta de obtener y/o poseer objetos pertenecientes o representativos de determinada(s) persona(s).

Escoptofilia o voyeurismo: Expresión comportamental de la sexualidad en la que las personas gustan de ver otros cuerpos y/o expresiones amorosas de otras personas.

Travestismo: Expresión comportamental de la sexualidad en la que las personas gustan de utilizar prendas, maneras, expresiones, accesorios o adornos característicos del sexo opuesto.

Existen muchos mitos alrededor de algunas de estas expresiones, así como cosas que hay que puntualizar, por ejemplo, en lo que se refiere al travestismo, no necesariamente es práctica de personas homosexuales, pues "la mayoría que lo realiza es heterosexual, tampoco es exclusiva de hombres."

Como en todo hay límites y éstos deben auto-plantearse. No puedes jamás forzar a alguien y ejercer la violencia para que suceda, eso es un delito y ni hablar de las repercusiones que habría en casos tan lamentables y cuestionables como la pedofilia.

En general, las expresiones comportamentales no son dañinas, ni peligrosas, siempre que se esté en perfecto orden mental y que no se juegue con la integridad física, lo cual puede sonar contradictorio si hablamos de masoquismo, pero "a fin de cuentas eso les satisface, es como el dolor igual a placer, para ellos se vale."

Y para dejar en claro que no todas las expresiones son raras o ajenas citemos otras más:

Grafofilia: Expresión comportamental de la sexualidad en la que se gusta de escribir y dibujar.

Audiofilia: Expresión comportamental de la sexualidad en la que se gusta de escuchar el medio ambiente, música etc.

Gastrofilia: Expresión comportamental de la sexualidad en la que se gusta de comer, (comida en general) o bien por un determinado alimento.

El sexólogo César Pérez nos habla de siete fases que hay en las expresiones comportamentales, las cuales pueden ser eróticas y no eróticas:

1. Mínima no erótica: Son las acciones y/o expresiones que hacemos día con día, como el comer, trabajar, bañarse.

2. Acentuada: Está ligada a lo que haces o te gusta, pero es pasional, un poco más allá del simple gusto; por ejemplo, comer es algo no erótico, pero si eres un chef, ves la comida de una manera distinta o un artista que gusta de que lo vean o admiren.

3. Erótica: En esta fase entra la parte erótica y la fantasía; es hacer algo con lo que te gusta; siguiendo con el ejemplo de la comida, que ésta se convierta en parte de un acto sexual o erótico, como el untar crema, mermelada, chocolate.

4. Erótica sexual mínima: Es cuando se realiza, por lo menos una vez, determinada expresión comportamental.

5. Expresión erótica sexual preferida: La expresión comportamental que se realiza más de una vez, pero menos de cinco.

6. Expresión erótica sexual predominante: Es la expresión comportamental que se realiza entre 8 y 10 veces.

7. Exclusiva: Es la que se realiza, como su nombre lo indica, de forma exclusiva, 10 veces de 10.

Todos tenemos algo que nos satisface, lo que sea, y eso puede ser una expresión comportamental; en caso de tener una pareja y querer realizar determinada expresión, "es bueno platicarlo y consensuarlo, a veces no es lo que se cree o se dice, es importante que se converse para decidir si se lleva o no a cabo".

Hay tantas expresiones como gustos, algunas no catalogadas y otras derivadas, lo importante es que se esté consciente de que no es algo "perverso", sino parte de la sexualidad.

¡¡¡¡¡¡SOY ADICTA AL SEXOOOO!!!!!


El gusto por tener muchas relaciones sexuales no necesariamente es algo placentero; existe la ninfomanía y satiriasis que tienen efectos negativos

No cabe duda que el tener relaciones sexuales o prácticas relacionadas como la masturbación, son de sumo placer para la mayoría de las personas, por lo que esas ganas y deseo de satisfacer esas necesidades están latentes gran parte del tiempo. Sin embargo, para la mayoría existe un tiempo, lugar y persona.

No es que se esté a favor o en contra de que se satisfagan los bajos instintos, después de todo el sexo es algo natural, y cada persona decide, al ser dueña de su cuerpo, qué es lo que hace con él.

Sin embargo, el tener relaciones sexuales o prácticas en demasía, siempre tiene sus consecuencias, y no son siempre positivas, incluso, no necesariamente es algo que se controle. Va más allá de si es bien visto o no el que alguien sea promiscuo o adicto al sexo.

La hipersexualidad o adicción al sexo, es el deseo de mantener un nivel de comportamiento sexual humano lo suficientemente alto como para ser considerado clínicamente significativo.

Las causas de la adicción pueden ser orgánicas, es decir, que se debe a lesiones, tumores o por accidentes angioencefálicos; también emocionales, donde puede creerse que las relaciones sexuales es la única forma de comunicación, asimismo puede ser por un trastorno psiquiátrico de obsesión por ciertas situaciones que hace que la persona incursione en actos que están relacionados con alteraciones de su vida social.

El sexólogo César Pérez del Imesex nos comenta:

"Primero hay que identificar qué es el sexo frecuente, lo cual, es algo relativo, para una persona tener relaciones una vez al día es tan normal como lo es para otra tenerlas una vez a la semana; entonces lo "normal" no existe jamás en sexualidad." Cada pareja (si es que existe) decidirá en concenso qué será lo que a ellos les plazca, definirán la frecuencia del sexo.

Y si me gusta mucho el sexo...

El que a alguien le guste mucho tener relaciones sexuales no es algo malo, siempre que haya los cuidados pertinentes y se esté consciente de las consecuencias que puede haber, como las relacionadas a si se hace con una o varias parejas, con o sin protección, lo que repercutiría en infecciones de transmisión sexual, entre otras cosas.

El término ninfomanía, se relaciona a las mujeres y su excesivo gusto por las relaciones sexuales, pero lo característico de este problema y que lo diferencia de la promiscuidad, es que es un apetito sexual exagerado (lo normal no se define), pero tienden a dominar el pensamiento y a no sentirse satisfechas.

"Son mujeres insaciables (sexualmente hablando), no sienten satisfacción, lo cual hace que aun cuando tengan muchas relaciones sexuales sientan la necesidad de más y más; en los hombres se llama "satiriasis".

Lo importante aquí es que la adicción al sexo se vuelve un problema, porque se dejan de lado las demás ocupaciones; "es como decir "no me importa dormir, comer, trabajar; lo que me importa es el sexo y ya".

Muchas veces no es sólo el tener ganas, sino que el satisfacerlas puede meter en serios problemas a la persona, pues esa necesidad puede hacer que tengan relaciones en un lugar público (lo que implica sanción), que paguen por sexo o pornografía, entre otros.

Síntomas

Los síntomas son en teoría fáciles de percibir; la persona tiene deseos desmesurados por tener sexo, esto sin importarle si la otra persona, sea su pareja o no, se satisface; ante una desesperación es capaz de forzar a alguien a tener relaciones, esto porque pierde el control de su voluntad en materia sexual; tiene muchos cambios de pareja y busca la pornografía (adulta o infantil).

Otro factor importante es que se pueden evidenciar actitudes de alguna otra expresión comportamental, que incluso puede juntarse con drogas o alcohol.

Tenemos entonces que la adicción sexual no es sólo el querer tener relaciones a todas horas, sino el cómo afecta en la vida cotidiana. Las pérdidas pueden ser tanto afectivas como económicas; el no poder entablar una relación sentimental, pues ese no es el fin; perder la noción de lo que se hace y lo que no. Cabe decir que si se detecta este problema se puede tratar, aunque es difícil que se quite del todo, pues queda siempre la posibilidad de una recaída y en su mayoría la causa predominante es genética.

Si te gusta el sexo diario, no significa que seas hipersexual, sin embargo, para poder satisfacer las necesidades, la pareja deberá tener esas mismas características, de no ser así, jamás se debe forzar a nadie a tener relaciones, ni buscar alternativas si es que se tiene una pareja; si es que tienes más de una, tampoco significa que seas adicto al sexo. No hay en este caso diferencia entre hombres y mujeres, ambos pueden presentar hipersexualidad.

¿Eres adicto al sexo?, ¿Crees que es un problema?
Cuentame tu caso

DIEZ RESPUESTAS A TIPICAS PREGUNTAS MASCULINAS


Por Elizabeth Flores
tVa.com.mx

En relación al sexo los hombres tienen muchas ideas, algunas correctas, otras equivocadas, acerca de lo que piensan las mujeres

Aquí, una lista de las que consideramos son las principales preguntas que tienen ellos respecto de las féminas en términos sexuales.

Las respuestas no son un secreto a voces. No hay mujer que no haya cuchicheado acerca de estos temas con otras en un café, en un bar, con sus mejores amigas, entre pasillos. Por eso hemos escogido las que consideramos son las mejores respuestas a las preguntas que casi nunca nos quieren hacer.

Algunas preguntas fueron retomadas de los mismos comentarios que dejan los seguidoras de tva.com.mx. Para quitarles un poco la mortificación, despejar sus dudas, y que ustedes hombres puedan dormir tranquilos, aquí nuestra divertida lista de diez.

¿Les gusta que les hablen vulgarmente durante el sexo?

Todas coincidieron en que depende del hombre, el momento, la situación y el lugar. Por desgracia, son muy pocas las parejas estables que tienen la confianza de decir sus fantasías o lo que en realidad desean.

No hay nada mejor que innovar y jugar en una relación. Claro, depende de la mujer y del hombre. A todas nos gusta sentirnos dirty woman en alguna ocasión. Y sí, nos gusta, tal vez no siempre. En ocasiones, por ejemplo en un día de sensibilidad o vulnerabilidad absoluta, si comienzas por hablarle rudo, y ella sólo quiere cariños y un abrazo, tal vez termine llorando.

Pero cuando la veas súper prendida y sepas que es el momento, suéltale algunas palabritas y si se prende más, entonces... no pares. Has dado en el clavo.

¿Por qué alguna vez en su vida las mujeres lindas han salido con un patán?

Bueno, eso es algo que ni las mujeres podemos responder. Y todas, todas, sin excepción, reconocen haber tenido una relación con un patán por excelencia. Es como un misterio de la naturaleza. Como a dónde van a parar los calcetines perdidos.

Pero en sesión femenina, creo que hemos dado con el hilo negro del asunto. Quizá un patán nos abre la posibilidad de llevar a cabo nuestras propias patanerías, nos da un cierto status de chica mala y nos permite caer en los mismos vicios de conducta que el patán en cuestión.

Es también una especie de pase de entrada hacia su mundo, el mundo masculino, en el que nos dejan ver cómo viven y se desarrollan en él.

¿Les gusta la idea de ser esclavizadas sexualmente?

A muchas no les pareció muy atractivo, pero hay muchas otras mujeres (sobre todo aquellas que tienen fantasías o practican el sadomasoquismo) que les encantaría ser parte de un juego sado alguna vez.

En ocasiones, les gustaría ser switch (cambiar roles) y ser ellas quienes dominen y luego ser esclavizadas. Si alguna vez ella se pone en el papel de dómina o sumisa, ya sabrán a qué jugar la próxima vez, podrán cambiar roles o interpretar el que más les apetezca. Tal vez hayan encontrado una nueva forma de juego para relacionarse.

¿Con qué cosas les gusta masturbarse?

Depende de cada mujer, su historia, su apertura, su vida sexual. Las opiniones se dividen. Algunas mujeres afirman que no y nunca lo harían con alguna otra cosa que no fuera el miembro de su marido o compañero, mientras que otras confesaron haberse masturbado con pepinos, zanahorias, pero sobretodo con dildos y vibradores de diversos tamaños, texturas, ritmos y colores.

Los dedos propios son también una de las principales herramientas a la hora de que las mujeres se den su propio placer. En últimos lugares quedaron telas, plumas y agua.

¿Les gustan las películas porno?

Todas las mujeres aceptaron que una peli porno profesional o un video amateur siempre enciende los motores, pero también coincidieron en que las historias a veces son desastrosas y en ocasiones subestiman el papel sexual de la mujer.

Claro, en una peli porno lo último que importa es la historia, pero nuestras féminas desacreditaron que la relación sexual en una película XXX se limite solamente a la penetración. Lo consideran totalmente masculino, pues en casi ninguna hay juego previo ni están hechas para responder a lo que les prende verdaderamente a las mujeres.

¿Les gustaría hacer un trío?

Sólo acaso un par de mujeres aceptó que entre copas, cuando una cosa lleva a la otra, ya se sabe, sucedió. Dos hombres y una mujer, dos mujeres y un hombre. Para las mujeres ésta es una de sus fantasías, sí, aunque no tan fuerte como lo es en los hombres. A veces les gustará ver cómo otro hombre penetra a su mujer o cómo su mujer tiene sexo con otra chica.

Sin embargo, la primera es muy difícil que suceda debido al ego masculino, y saberse peor en cantidad o calidad que el otro, sería catastrófico. Los hombres coinciden en que les encantaría llevar a cabo esta fantasía con alguien a quien aman siempre y cuando ella no involucre sentimientos con el otro hombre en cuestión. Ellas opinaron lo mismo. La fantasía es fantasía y no debería involucrar al amor en ella.

¿Les gusta la lluvia dorada y el scat?

La mayoría de las mujeres a las que preguntamos dijeron no a estas prácticas. Incluso las más abiertas también tienen sus reticencias. La mayoría no saben de qué se trata.

También, por supuesto, tiene que ver la salud y la limpieza. En el sexo casual ésta es una de las principales prácticas.

¿Siempre están dispuestas al sexo casual?

Una mujer siempre buscará el lado emocional, por más casual que sea el sexo. Siempre se quedará esperando por lo menos una llamada o un email del tipo con el que se acostó si es que éste le gusta.

Pero, otras veces, no tanto. A veces, corremos despavoridas después de una relación casual que no nos gustó o que tuvimos sólo para satisfacer nuestro instinto sexual. Dispuestas al sexo siempre estamos, la cuestión es cómo y con quién.

¿Les gusta o no el semen?

El sabor del semen depende de cada hombre, de lo que haya comido, cómo se alimenta, si lleva una vida saludable o no, si ha bebido alcohol o ha probado alguna droga, tiempo antes al sexo.

No es que, como dijeron nuestras mujeres, andemos por la vida catando semen, pero cada una de estas situaciones hace que el sabor cambie. Hay en quienes no sabe del todo mal; en otros, mejor ni acercarse...

¿Les gusta el sexo salvaje?

Por supuesto. Siempre. A toda mujer. No hay una a la que no le guste. Hay grados de salvajismo, eso sí. Hay féminas a las que les gusta apenas un poco; otras que no pueden vivir sin él. Lo mejor de ello es preguntarle a las mujeres qué quieren o cómo les gusta. A veces puede ser una buena opción tomarla por asalto un día, cuando menos lo espere, en un lugar fuera de lo común (puede ser en la misma casa pero en un lugar que no sea precisamente la cama). Todas coincidimos con que el sexo salvaje es siempre mejor si no se prepara, si nos toma por sorpresa de manos del hombre que amamos para darle variedad a la vida sexual e improvisar para darle un toque perversamente divertido a nuestra relación.

DOGGING: PLACER PUBLICO SANCIONADO EN MEXICO

por tVa.com.mx

Tener relaciones sexuales en la vía pública se considera como faltas a la moral, genera una multa desde 500 hasta 3 mil pesos.

Los lugares para el sexo son variados, no siempre son en una recámara o el interior del hogar, esto se debe a muchos factores, uno de ellos las ganas de vivir cosas nuevas, de romper la monotonía y aumentar el grado de éxtasis; también de que no siempre hay tiempo o espacio para el sexo, por lo que hacerlo en casa puede no ser la mejor opción.

Una de las prácticas sexuales es el dogging, cuyo término tiene su origen en Gran Bretaña, donde en los años 70 los hombres paseaban a su perro (dog) y espiaban a parejas furtivas teniendo sexo al aire libre.

El dogging se realiza al aire libre, en parques, bosques, autos; existen grupos en Francia, Italia, Bélgica y ahora América Latina. Cabe destacar que esta práctica no es con el fin de atraer voyeurs, ni se considera una práctica exhibicionista, es solo una expresión física y sexual, esto por la relación que puede existir con las expresiones comportamentales de la sexualidad, donde el dogging forma parte de ellas.

En México esta práctica no está permitida, ya que tener sexo en la vía pública se considera como faltas a la moral y genera una multa que puede ir desde los 500 hasta los 3mil pesos. Según un sondeo realizado por El Universal, la mayoría opina que no sería una práctica muy popular, porque aún somos muchos habitantes y la educación es menos abierta.

Sin embargo, esto no significa que no se realice, ya que en la red hay foros donde se busca esa práctica, pero no hay algo establecido.

La sexóloga Carolina Londoño en ciudad.com.ar aclara que "no se trata de enfermedades sino de gustos eróticos y que todo depende de la estructura personal de cada uno, su historia y sus relaciones con el resto".

Por otro lado, el dogging no es exclusivo de las parejas estables, sino que en algún encuentro casual puede darse la oportunidad, lo que lo hace común en ascensores, probadores de tiendas y un sin fin de lugares más; el sexólogo Sergio Valencia en terra.com.mx comenta que es "erotismo puro, sólo placer por placer en búsqueda de satisfacer la sexualidad".

En el respeto a los demás está la clave, por más que se quiera, si esto interfiere con la vida de alguien más, no debería realizarse; como toda práctica tiene sus límites, ya que dependiendo el lugar donde se realice, puede cometerse un delito o generar otros, y ante todo lo más importante es no violentar la voluntad de nadie.

En países como España hay una red que realiza foros donde los doggers se citan afuera de las ciudades en zonas solitarias para no ser molestados por nadie. Después definen si acuden y en qué plan, ya sea a mirar, ser visto, tocar o ser tocado.

PRACTICA DEL MES: SABES LO QUE ES COTTAGING??

Por Héctor Ledezma
tVa.com.mx

Es una práctica poco conocida que se realiza entre hombres, los cuales pueden ser homosexuales o heterosexuales, además casados y con ello tener una doble vida.

En sexualidad y particularmente en lo referente a relaciones sexuales, hay diversas prácticas que van desde la forma de tener relaciones, hasta los lugares donde se realizan. Muchas de esas prácticas son derivaciones de otras.

Tal es el caso del dogging, que consiste en tener relaciones sexuales en lugares públicos. Existe el llamado cruising, que es el salir a la calle en busca de encuentros sexuales, ésta es realizada por hombres y mujeres, tanto heterosexuales como homosexuales y su atractivo es la variedad y novedad en las relaciones.

La diferencia entre estas dos actividades sexuales es que el dogging generalmente se realiza con una pareja estable y el cruising ocurre con desconocidos y jamás se repite pareja sexual; difiere de la prostitución pues no hay dinero de por medio.

Derivada del cruising, el cottaging, es una actividad sexual anónima en baños públicos y se realiza entre hombres: En ocaciones el baño es el punto de encuentro para relaciones sexuales en otro lugar.

El nombre cottaging viene del argot británico, ya que un "cottage" es una casa de tipo rural y en este contexto se refiere a los baños públicos que tienen esa apariencia. Aunque el nombre ya se ha generalizado, en Estados Unidos se le conoce como tea-rooms (salones de té).

Laud Humphreys, de acuerdo con el sitio soitu.es, investigó el fenómeno asociado a hombres homosexuales y heterosexuales, la mayoría de éstos últimos casados, que buscaban el sexo ocasional y anónimo. La práctica es sencilla, hay un contacto visual, saludos sutiles, en los que uno inicia y el otro continúa.

En 1970 Humphreys publicó los resultados de un trabajo de investigación, donde el cottagging se realizaba en lugares concurridos, como estaciones de tren, de autobuses, aeropuertos. Generalmente donde no hacen falta más de 15 minutos para la actividad.

El sexólogo del Imesex, César Pérez comenta:

"Nos encontramos ante una práctica, como hay muchas, para satisfacer deseos y fantasías, pero también a una actividad que puede generar ruido en muchas personas, sobre todo heterosexuales, porque al ser una práctica entre hombres es mal vista, y esto va más allá".

Es una actividad entre varones, los cuales pueden ser homosexuales o heterosexuales, la duda radica en que un hombre casado asumido como heterosexual que tenga este tipo de práctica, es visto como un homosexual reprimido. Esto no siempre es así, enfatizó el especialista.

"Dentro de las prácticas sexuales está la que llamamos HSH (Hombres que tienen Sexo con Hombres), que no es una orientación o preferencia sexual; sino que consiste en que hombres heterosexuales o que vulgarmente se conocen como "heteroflexibles", gustan de tener relaciones con otros hombres sin que haya un afecto de por medio, es decir, es sólo placer sexual.

Esto además se da mucho en lugares donde no hay acceso a sexo heterosexual constante, como las cárceles, hospitales psiquiátricos, el ejército", dice Pérez.

No se puede generalizar en una actividad como el cottaging, que sea exclusiva de homosexuales, pues dentro de las preferencias u orientaciones sexuales, tanto los seres heterosexuales como homosexuales presenten variantes, como lo explica el Modelo de la Preferencia Genérica.

Entre la infidelidad y las infecciones

El estudio de Laud Humphreys, mencionado anteriormente, asegura que el cottaging suele realizarse por hombres casados que cuentan con compromisos familiares y profesionales. Lo impersonal de la situación les facilita mantener distancia emocional, y que incluso se puede experimentar un intenso orgasmo sin un gran esfuerzo, lo que le da a la actividad una atracción extra.

Por tal motivo, un hombre que tenga una relación de pareja con otra persona y que practique esta actividad puede enfrentarse a Infecciones de Transmisión Sexual y la infidelidad.

"Lo ideal, como en toda práctica que no sea con una pareja estable, es usar condón y con esto evitar las infecciones, pues al ser con desconocidos no sabes si tienen alguna o no; si te proteges no existe riesgo de infección, y evitas el pasar alguna a otras personas.

Por otro lado, está la parte emocional y lo referente a la infidelidad, que denominamos como la falta de cumplimiento de exclusividad entre las parejas, ya sean casadas, en relación de noviazgo o unión libre, donde se incluye la pertenencia sexual además de sentimental".

El cottaging es una actividad no permitida en México, pues afecta a las buenas costumbres; ni el dogging, ni el cruising son actividades que puedan hacerse libremente. Las personas que lo realizan van creando sus puntos de encuentro de forma clandestina, lo que hace que este tipo de actividades sean practicadas sin que se sepa mucho de ellas.

LOS ERRORES DE ELLOS EN LA CAMA


Por Elizabeth Flores
tVa.com.mx

A las mujeres les gusta sentirse deseadas y amadas. A veces de un modo salvaje; otras, de una forma dulce y silenciosa. Siempre es bueno explorar.

Cómo estuve? ¿te gustó? ¿lo hice bien? Son algunas de las preguntas que escuchamos las mujeres, por lo menos, una vez en la vida. Casi ningún hombre cumple al cien por ciento con nuestras exigencias sexuales. Al final siempre terminamos respondiendo: con una sonrisa de pasta dental y un adormilado sí, cuando nos callamos un rotundo "no, déjame dormir y no me quites la cobija".

Y sucede que justo cuando preguntan es cuando con una sonrisa de pasta dental y un adormilado sí, nos callamos un rotundo "NO".

Claro, no siempre pasa, pero la cuestión es que las mujeres casi nunca les decimos sus errores. Pero en esta columna temática El jardín de las Delicias les permitimos espiar entre nuestras intimidades. Para enumerar los errores que cometen, no sólo en la cama, tendríamos que publicar un portal especial para ello, pero no podemos, así que abreviemos.

Sólo déjate guiar por tus instintos y los de ella. No te creas nunca el rey de la cama. Siempre habrá cosas nuevas qué aprender y si es con tu pareja estable, mucho mejor. Tampoco creas que por tu linda cara conseguirás todo y fácil. Si eres guapo y arrogante, conseguirás mucho menos que si eres gentil, atento y buscas tu propio placer sin olvidarte del goce de ella.

Tu mayor poder sexual está en las manos, las palabras y en la lengua. Y de eso sí puedes hacer gala desde antes. Tómate tu tiempo para seducir y luego para embestir.

Siempre lo más sabroso se saborea con calma. Así que cuanto más tiempo inviertas en caricias, en besos apasionados, en roces delicados, antes de llegar a la penetración, al final, créeme, saldrás ganando.

Que te preocupe la creatividad, no el tamaño. Lo segundo es cuestión de gustos. Hay a quienes les gusta monumental, pero éste por sí mismo, no proporciona ningún placer, y la mayoría de las mujeres coincide en que los prefiere standard siempre y cuando sean ágiles y veloces.

Siempre es bueno explorar, así que si las mujeres proponen algún juego, no te asustes. Tiene que haber complicidad a la hora de los juegos sexuales. Tampoco queremos sentirnos "bien" cuando de tener sexo se trata. Uno busca sentirse bien cuando se toma un café o se descansa, no cuando se tiene sexo. Nos gusta sentirnos deseadas, amadas y veneradas, sí, pero a veces de un modo salvaje; otras, de una forma dulce y silenciosa.

Diez mitos en torno al sexo

1 Sexo es igual a penetración (podemos tener una divertida y deliciosa noche de sexo sin penetración, sólo usando manos, dedos, lengua, besos y piel).

2 Existen normas que dictan lo que es normal y anormal en sexualidad (todo ello es muy subjetivo).

3 Durante la relación sexual no se le debe decir al otro los propios deseos o fantasías (siempre es bueno saber que uno no es el raro y que al otro con seguridad también le gustará).

4 La relación sexual deberá ser natural y espontánea (en ocasiones cuando se planea, cuando tu mujer usa lencería sexy o se prepara el escenario, puede resultar también muy candente).

5 Es una desviación tener fantasías con otra persona durante la relación sexual (¿perdón.. Acaso ustedes hombres no lo hacen? ¡Nosotras también!).

6· Todos los problemas de pareja se arreglan en la cama (según la sicología, la cama es uno de los primeros lugares al que se trasladan los problemas y una pareja sabe que las cosas no marchan bien. El cuerpo no miente).

7· Si funciona el sexo, entonces la pareja funciona.

8· El orgasmo es más placentero si ambas personas llegan a la vez (mentira rotunda, también se puede disfrutar si sólo uno de los dos lo tiene y continúa el juego sexual).

9· Los hombres tienen mucho más deseo que las mujeres (está comprobado que nosotras también pensamos varias veces al día en sexo y que nuestro deseo puede incendiar cualquier lugar que se nos ponga enfrente en ese momento. Nos reprimimos más y casi nadie lo nota, eso sí, pero de que lo hay, lo hay).

10· Cuando el hombre eyacula termina la relación sexual (nosotras siempre queremos seguir explorando, una y otra vez).

Los 10 errores de pensamiento:

*Orgasmo es igual a placer intenso. Hay diferentes intensidades en cada orgasmo femenino y masculino.

*Olvidarte del placer de ella.

*Pensar que la brutalidad es muchas veces excitante.

*Que una mujer se moje no significa que está en el clímax total, y si no se moja no significa que no esté excitada tampoco significa que no le gustas. Son las hormonas e irregularidades menstruales las que influyen en ello.

*Entre más grande sea el pene, más es el placer.

*Creer que sin condón sabe mejor o se disfruta diferente.

*Si la mujer trae condón es una loca y por eso se puede acostar con cualquiera. Al contrario, es precavida y sana.

*Dar por hecho todo. Siempre investiga por ti mismo.

*Pensar que todas las mujeres son multiorgásmicas o que todas son frígidas. Cada una es diferente y aprende a explorar el enorme mundo que significa la tuya.

*Anticipar tus prejuicios a tu relación sexual. Sólo vive tu vida y vive el amor a través del sexo. Cada pareja es un universo.

Consejos generales:

La comunicación y la intuición es la base de todo. Habla con tu pareja acerca de lo que no está funcionando, cómo cambiarlo o qué le gusta a ella. Si ella no lo dice por vergüenza, intuye y sorpréndela.

Explora, averigua y arriesga por ti mismo. No te creas lo que dicen tus amigos o ves en las películas.

No te olvides de que también tenemos otro par de labios. ¡Ey, los de arriba! A veces sólo un beso ultra cachondo e intenso nos puede poner a tope.

*No pienses que somos complejas. No lo somos, sólo aprende a conocer nuestra piel.

*Lo importante no es la penetración en sí misma, sino lo que implica el viaje erótico.

*Las mujeres embarazadas pueden tener sexo y a veces es mucho mejor. Hay meses, sobre todo al final, en la gestación en las que están realmente excitadas.

*No te asustes si tu mujer te da opciones para iniciar un nuevo juego sexual. Si lo hace es porque te ama demasiado como para decirlo. De ti dependerá darle rienda suelta a sus placeres.

*Si estás casado, vives con tu pareja o tienes una relación de años de noviazgo, que no desaparezca la pasión en tu cama. Siempre descubre nuevas cosas, investiguen juntos, enamórate de nuevo, compra literatura erótica y reinventen su sexualidad.

DIEZ PASOS PARA BESAR APASIONADAMENTE

Por Elizabeth Flores
tVa.com.mx

El beso es el primer paso antes de dar lugar a una relación sexual, al matrimonio, a los hijos, una vida entera, el divorcio, la muerte. El primer beso siempre dirá mucho de lo siguiente.

Besar. La cosa más sencilla en una relación de pareja ¿no? Sin embargo, es el primer paso, antes de dar lugar a una relación sexual, al matrimonio, a los hijos, una vida entera, el divorcio, la separación, la muerte. O a nada. En una relación casual, un beso y se acabó. Lo que sigue. Sin embargo, aún así... todo comenzó con un beso. ¿O no?

Y de ahí que, viéndolo bien, ese sencillo y breve primer acto no sea del todo insignificante. Quizá no lo has contado a nadie para no sentirte tan... vano, pero alguna vez dejaste de estar con alguien porque no besaba bien.

Te has preguntado ¿cómo besas tú? ¿qué dicen tus besos de ti? ¿y si hay alguien en tu historial amoroso que piensa que besas mal?

A todos nos ha tocado todo tipo de besos: los cumplidores, los peor es nada, los que te dejan sin aliento, los de muy mal aliento, los que te excitan, los salivosos, los que no tienen pasión, los preferiste nunca haber dado, los tiernos, los cachondos, los dulces, y los que saben a gloria.

Y es que el primer beso siempre dirá mucho de lo siguiente. Más que una técnica puede ser una clave básica de espionaje para saber si tu cuerpo funciona junto al suyo, si hay química o no, si se llevan bien o tus labios definitivamente lo rechazan.

Eso es algo importante: a las mujeres en particular, un beso nos da mucha información. Para el hombre, no tiene el mismo rango de importancia que para nosotras. Regularmente, durante el beso, ellos ya están pensando en la erección y en el siguiente paso. Nosotras también, pero no pasaremos a ello -o lo dudaremos- si el primer beso no es tan bueno o no nos prende demasiado.

Además, debemos tomar en cuenta que besar bien no te augura el éxito, pero besar mal lleva definitivamente al fracaso. Por eso es tan importante que aprendamos a besar bien. Si ya lo haces y te lo han dicho, ¡felicidades! Si nadie te lo ha hecho... entonces más que preocuparte, ocúpate.

Decálogo del beso

1.El primer paso. En estos tiempos no importa quién tome la iniciativa. Él o ella, da lo mismo. Lo importante es que cumpla su objetivo, si la intención es que sea dulce, salvaje, sencillo o sorpresivo. Toma tu tiempo, no acoses ni presiones. Además, debes saber que cada persona tiene su estilo muy particular, como tú mismo, y hasta antes del primer beso no lo sabrás.

Por eso no comiences por mover tu boca como para comer al otro. No abras demasiado la boca ni la cierres como para que el otro no pueda explorar. Se recomienda que el primer beso sea siempre lento, sutil, erótico y suave (claro, depende del lugar y las circunstancias, a veces uno salvaje y pasional nos llevará directo a la acción). Lo más sencillo es siempre lo mejor, recuérdalo.

2.El beso no sólo sucede en los labios. Claro, son la herramienta pero no siempre el objetivo. Por eso, puedes comenzar por dar pequeños besos en su oreja, en su cuello, sacar un poco la lengua sólo para que la otra persona sienta otro tipo de roce, ascender por el rostro (sólo recuerda que tu lengua no deje empapadas las mejillas de tu pareja), tocar sus ojos cerrados con pequeños besitos, hacer un beso en triángulo (es decir, beso a los dos ojos cerrados y luego los labios), y hacer todo un recorrido hasta llegar al final o comenzar por la boca y hacer el mismo recorrido al revés.

3.Juega. Inventa tus propios tipos de besos, juega, inventen besos a distancia, cuando no puedan tocarse o accionar sus labios, o simplemente como una demostración de amor tierno.

Inventen sus propias técnicas para besarse en los labios también. Un día experimenten, dejen de aburrirse con los besos de siempre y salgan de la rutina. ¿Qué tal un beso con una gotita de salsa picante para ver quién soporta más tiempo? ¿con jarabe de chocolate? ¿con miel? ¿con crema chantilly? ¿luego de pasarse un hielo por los labios de ambos?

Existen labiales especiales que puedes encontrar en sex shops o perfumerías hechos a base de crema de cacao que ofrecen sensaciones, por ejemplo caliente o picoso, y frío.

Si están en el acto sexual o en el preámbulo, puedes usar alguno de los lubricantes de sabor comestibles que con el beso da una sensación de calor y que puedes encontrar en cualquier sex shop.

4.¿Con o sin lengua? A veces, el hecho de que exista lengua de por medio no garantiza un buen beso. Podrá haber lengua pero no necesariamente. En ocasiones, un beso sencillo sin lengua puede ser igual de erótico que otro que sí la lleve.

Cuando se da un beso con lengua, hay que considerar que no se trata de un simple roce. Hacerlo despacio y sin prisas, no babear, pasar lentamente la lengua por los labios de tu pareja, dar suaves mordiscos en un labio, acariciar delicadamente su lengua con la tuya, y hacerlo extraordinariamente sensual y erótico, salvaje y pasional, o tierno y amoroso, depende del momento.

5.Utiliza el resto del cuerpo. Has aprendido a besar y saber perfectamente cómo mover la lengua dentro de la boca del otro. Excelente.

No puede terminar de ser un beso erótico sin movimientos externos que refuercen lo que está sucediendo con los movimientos al interior de la boca. Por eso, toca su cabello, acaricia su espalda, sus hombros, roza con la yema de tus dedos el rostro (lo que puede quedar al descubierto), o el cuello, y cuando el beso se ponga intenso, entonces puedes bajar tu mano para rozar apenas los genitales con tus dedos y luego, tal vez, llevarlos más allá.

El cabello y el cuero cabelludo es para muchas mujeres una zona erógena. Así que si te encuentras con que tu mujer encuentra agradable que le toques el cuero cabelludo de manera firme y con pequeños jalones de cabello (nada doloroso, por favor) entonces conseguirás excitarla después de una buena dosis de besos.

6.Cómo lograr el mejor beso salvaje. A veces puede llegar como consecuencia de un beso dulce y tierno, o a veces puede llegar así, de la nada, intensamente, como las mejores cosas. Si te ha tocado recibir éste, felicidades, es de los mejores que existen en la gama de los besos.

Si quieres darlos y tomar por sorpresa a tu pareja, comienza por introducir tu lengua alternando de manera profunda y luego introduciéndola ligeramente para hacer pequeñas cosquillas con ésta justo en el borde de las encías o el paladar.

Muerde levemente las comisuras o el labio de tu pareja. No dejes secuelas, no queremos que ese labio sangre. Solamente apenas para hacerlo más sensual y erótico.

7.Exprésate. Mientras besas a alguien no tienes que permanecer en absoluto silencio. Haz pequeños ruiditos, gemidos leves incluso, exprésate y dile a tu pareja, por ejemplo, lo que te gustaría hacerle después de ese maravilloso beso, las cosas que te gustan de ella o él, lo mucho que lo o la extrañaste, las partes de su cuerpo que te excitan.

8.Movimientos justos. Los movimientos deben ser suaves y acompasados. Lo más aconsejable es intentar descubrir el estilo que marca tu pareja. No hay nada peor que besar con prisa o sólo por costumbre, con el mismo ritmo de siempre.

Ni muy rápido ni lento, sólo los movimientos justos acordes a la situación, el momento y la persona. Dejen tiempos para descansar, y luego retomar nuevamente el beso. Respiren con calma.

9.Cuida tus labios y tu limpieza bucal. Los labios secos o resecos no son para nada sexys, mucho menos aquellos que tienen piel seca o muerta colgando por ahí. Hoy en día todas las marcas de cremas prestigiadas tienen productos exclusivos para los labios (desde aquellos que quitan las arrugas, hasta los que los vuelven más carnosos y permiten la larga duración del labial), aunque a veces una sola pasadita de una simple pero efectiva crema de cacao no cae nada mal.

También, parecería una recomendación absurda, pero besar una boca sucia, con caries o que no vio pasar la pasta dental durante el día, es totalmente antisexy. El respeto por el otro, en cuestiones amatorias, comienza con la limpieza por uno mismo.

10.Besa como si fuera la última vez. Proponte este día, este fin de semana, esta noche darle un beso a tu pareja como si fuera la última vez.

Como si supieras que no lo verás en días o en meses. Que extrañarás sus labios el resto del tiempo hasta que se vuelvan a encontrar, como si de meses se tratara. Verás que será diferente porque querrás disfrutarlo al máximo, no querrás perderte ninguna sensación y lo querrás hacer eterno.

En ocasiones la monotonía, la rutina, el "ya conozco cómo besa", o pensar que no habrá nada nuevo en los besos del otro, es el veneno mortífero para todo beso erótico, amoroso, tierno o sensual. Si te gustaría ser recordado por tus besos, comienza ahora.

Como si apenas estuvieras aprendiendo a besar, como si tocaras los labios de tu pareja con los tuyos por primera vez, como si no quisieras olvidarlos nunca.

Y tú ¿qué tipo de besos prefieres?

viernes, 22 de mayo de 2009

TRUCO SEXUAL DEL MES: SATINISMO



¡No confundir con el satanismo! Puede que no te parezca nada raro que el satén resulte erótico, pero lo cierto es que los “satinistas” llevan sus gustos hasta el extremo. ¡Sólo el satén consigue ponerles a tono! Puede que haya llegado el momento de sacar esa blusita tan formal del armario y darle un nuevo uso...



¿Por qué resulta excitante?

“El satén es visual y también es táctil, así que estimula los sentidos”, explica Cano. La sexóloga Raquel Francés está de acuerdo con ella: “El satén invita a tocar, a rozar, nos ayuda a apreciar más el cuerpo. Nos invita a tomarnos nuestro tiempo en el sexo”.



Más divertido, menos fetichista

Ata un pañuelo de seda alrededor de tu muslo y pídele que te lo quite con los dientes. Luego recorre todo su cuerpo con él. También puedes meter unas medias de seda en el refrigerador durante una media hora. La seda fría provocará increíbles sensaciones en su piel… y en la tuya.

COMO AUMENTAR EL PLACER A LA HORA DEL SEXO

cortesia de cosmohispano.com



Hacer el amor es algo que deja una sensación cálida y reconfortante pero, ¿Cómo aumentar el placer en el coito?, ¿sabrías decirnos qué es lo que ocurre exactamente en tu cuerpo durante una sesión de sexo?

Seguramente desconozcas la respuesta y el caso es que sólo cuando se conocen las reacciones corporales durante este proceso -excitación, meseta, orgasmo y resolución- se puede maximizar el placer en cada una de ellas. Echa un vistazo a este reportaje, porque te lo explicamos todo al detalle, desde antes de los juegos previos al coito hasta la siesta postcoito.


LA EXCITACIÓN

Se produce en cuanto empiezas a responder al deseo, que, ¡ojo! puede ser desencadenado por un pensamiento o un simple roce que haga aumentar tu placer. Muchas veces no se necesita ni estimulación física para excitarte, aunque sí hay que estar física y mentalmente activa para seguir progresando en esta fase. Por eso, en el momento en que tu chico y tú empecéis a hacer el amor intenta mantener la concentración, de manera que la excitación siga construyéndose.

Los pezones se endurecen,ya que el riego sanguíneo aumenta y hace que se endurezcan los músculos que rodean los pechos. A medida que los vasos sanguíneos se ensanchan, las areolas se vuelven más oscuras y sensibles a la estimulación. Es un buen momento para que él se prodigue acariciando y lamiendo los pezones y alrededores.

Los genitales se hinchan.El riego sanguíneo también provoca un aumento de tamaño en el clítoris, esto hace que tu placer aumente. Éste se endurece y la zona se vuelve más sensible. Es el momento idóneo para que tu chico te estimule manual u oralmente. En esta fase, las paredes vaginales suelen aumentar hasta un 50% su grosor. Para intensificar la excitación, los sexólogos aconsejan contraer los músculos internos haciendo los famosos ejercicios de Kegel.

Empiezas a lubricar.Al aumentar el placer empiezas a lubricar. Como respuesta a la excitación las glándulas del cérvix y la vagina se hinchan y segregan el fluido que facilita la penetración. A veces ocurre que la lubricación cesa y desaparece. En ese caso, haz lo necesario para recuperar la excitación, piérdete en una fantasía, sugiérele a tu chico que te acaricie el clítoris muy despacio o te haga un cunnilingus o bien usa un lubricante hidrosoluble.

Aparece el "rubor facial". El flujo sanguíneo en la zona de la cabeza, el cuello y el pecho producen un ligero enrojecimiento en el cutis que se suele apreciar más en mujeres de piel clara.



LA MESETA

Estás en la cumbre de la excitación, justo antes del clímax. Es esencial que, tal y como aconsejan los sexólogos, no fuerces el orgasmo porque lo más probable es que si te preocupas demasiado en conseguirlo acabe escapándose. Intenta relajarte y deja que suceda, aumentar el placer poco a poco es bueno para luego no tener bajones bruscos.

Los pechos se hinchan. El incremento en el riego sanguíneo puede hacer que tus pechos se agranden hasta un 25% y estén más sensibles. Pídele a tu chico que cuando te toque sea muy, muy delicado.

Las zonas erógenas se extrasensibilizan.Como fluye más sangre y de forma más rápida las partes del cuerpo repletas de terminaciones nerviosas, como las orejas, los senos y la nuca, se vuelven más sensibles y reaccionan mejor a las caricias.

Tienes una erección.Sí, has oído bien. Justo antes del clímax el clítoris se endurece y se contrae hacia el hueso púbico. La parte alta de la vagina se expande aproximadamente un 10% y el útero se eleva algunos milímetros para hacerle sitio al pene.

Los músculos se tensan.Todo el cuerpo se tensa, aumenta el ritmo cardíaco y también la presión sanguínea. El flujo de sangre hace que el tercio inferior de la vagina se hinche y sus músculos se compriman, reduciendo la abertura vaginal. Es el mejor momento para sentir intensamente la penetración, así que, si tu chico todavía no lo ha hecho, no tiene tiempo que perder. Ambos disfrutaréis al máximo de toda esa tensión muscular.



EL ORGASMO

Por desgracia, el orgasmo es una estupenda sensación de euforia física que no dura más de un minuto y, después de ese breve periodo de tiempo, la tensión que se ha ido acumulando al aumentar el placer se libera. Pero antes te daremos algunas sugerencias para que te sea más fácil alcanzar el orgasmo durante la penetración: intenta mantener la estimulación clitoriana, rózate contra su hueso púbico o, si tú estás encima de él, dile te estimule manualmente o hazlo tú misma.

Otro truco es que te presione con los dedos sobre el perineo, la zona que queda entre la vagina y el ano. Este pequeño gesto desplaza la entrada de la vagina, permite una penetración más profunda y un contacto más directo con la pared vaginal superior repleta de terminaciones nerviosas.

Se pierde el control de los sentidos.La megasensación orgásmica es capaz de provocar el bloqueo momentáneo de otro tipo de sensaciones y hacer que el cerebro se desconecte brevemente, en mayor o menor medida. Se produce una sensación cálida en la zona de la pelvis, el "rubor sexual" alcanza su máximo nivel y el cuerpo responde sin que puedas dominarlo. Relájate y déjate llevar.

Los músculos se contraen. Antes de que tu chico se retire del todo, haz algunas repeticiones de los ejercicios de Kegel. ¿Para qué? De esta forma creas una presión muy estimulante en su pene y en tu punto G. Pero no sólo se contraen los músculos genitales, de hecho, en la cumbre del orgasmo, todo tu cuerpo puede ponerse rígido momentáneamente. ¿Y qué más? El ritmo cardíaco aumenta y el pulso puede llegar a doblarse.

LA RESOLUCIÓN

En el período post orgásmico tu cuerpo vuelve a su estado de preexcitación.

Te relajas. Los músculos dejan de estar tensos, la respiración se ralentiza y desciende la presión sanguínea.

Todo el cuerpo recupera su estado normal. Los pechos y los genitales vuelven a su tamaño y color habitual y desaparece el "rubor facial".

La hipersensibilidad permanece. Por eso, un roce intenso en los genitales puede resultar incómodo. Es mejor que os centréis en otro tipo de placeres, como daros un masaje en la espalda, haceros caricias por el vientre, hablar mientras os miráis a los ojos o quedaros dormidos un ratinín hasta que llegue el momento del segundo asalto.

COMO MEJORAR LA VIDA SEXUAL

cortesia cosmohispano.com

¿Quieres subir de nivel en la categoría de "habilidosa sexual"? El paso básico es abandonar la rutina y probar algunas alternativas tremendamente eróticas, para mejorar la vida sexual en pareja. Para ello, Cosmo te propone lo último en retos sexuales. Con ayuda de expertos en la materia y no exento de alguna dificultad, el resultado de este apasionante curso es un único y loable objetivo: acceder a tu yo aventurero para que rompas tus limitaciones y hagas que el placer sin medida forme parte de tu vida diaria.

Así que si estás preparada para enfrentarte a nuestras apuestas sexuales, te presentamos una guía sexual con el paso a paso para disfrutar desde que se enciende la chispa con los juegos preliminares hasta la explosión de los orgasmos múltiples. Incluso hemos asignado a cada desafío una pícara puntuación del uno al diez que indica lo ambicioso de cada reto y su dificultad... pero también lo gratificante que te resultará. El juego empieza justo aquí.


Ejercicios sexuales de calentamiento

No sabes cómo mejorar la vida sexual pero.....¿Quieres empezar con ventaja la competición sexual de Cosmo? Sigue este precalentamiento.


Activar motores


Suda y suda, en el gimnasio o rompiendo la pista de baile. La actividad física aumenta la lubricación vaginal. El ejercicio hace mejorar la vida sexual en pareja. Estar en buena forma es importante para practicar buenas sesiones de sexo.


Conseguir elasticidad


Estira tus músculos inguinales sentándote en el suelo con las rodillas flexionadas y las plantas de los pies juntas, estilo mariposa. Sujeta tus pies e intenta bajar las rodillas hasta que toquen el suelo. Después, echa el cuerpo hacia adelante y mantente en esa posición durante unos 20 segundos. De esta manera los músculos se estirarán y, poco a poco, aumentarás tu elasticidad, seguro que lo notas también con tu chico.

Crear un ambiente erótico

Enciende unas velas o reemplaza tus bombillas habituales por unas de color rojo para crear un ambiente más sensual. Después, pon música sugerente que te incite a bailar el mambo... en la cama. Crear intimidad en una habitación es crear intimidad con tu pareja, por eso puede ser un buen método para mejorar la vida sexual con tu pareja.

miércoles, 20 de mayo de 2009

HISTORIA DE LAS ORGIAS


Al parecer, los griegos habrían sido una cultura hedonista, cuyo secreto de la felicidad, así entendida, se manifestaba en el hecho de haber comprendido, mejor que nadie, que el anhelo por conseguir una meta, un objetivo unívoco, excluyendo en ello todo lo demás, era el principio de todos los males, la cuna de toda forma de desdicha. ¿Habrían sido por ello, los griegos, una cultura ateleológica? Esa filosofía marca el ethos de los griegos, y la razón por la que tanto el placer como lubricidad habrían tenido un carácter y una connotación tan importante y tan seria para ellos que habrían llegado incluso a concebirlos como la forma propiamente tal de su religiosidad y de toda religiosidad posible. El lema de los griegos, según el cual, el afán por alcanzar una cosa bajo ningún pretexto podía impedir el goce de otra, con el que Partridge caracteriza el ethos griego, habría hecho que éstos basaran “...sus ideales y comportamiento en un hedonismo extraordinariamente simple y sensual” De este modo, los griegos habrían sido un pueblo dispuesto para el placer, y en su cotidianidad, como nos informa Partridge, habrían demostrado “...un inconfundible entusiasmo por la vida, caracterizado por la gracia, la elegancia y la comprensión del arte de vivir, ya fuera en lo refernte a la comida, la vestimenta o el control de la sexualidad” Toda la administración de la ciudad partía de este principio para establecer, a partir de allí, las necesidades de los ciudadanos y las cosas de relevancia para Polis. El criterio del placer era el que ordenaba las jerarquías de las cosas que eran importantes para la ciudad, pues, para los griegos de la antigüedad, el placer era lo primero. Así parece testimoniarlo el poeta Simónides de Ceos cuando pregunta: “¿Sería la vida de los mortales deliciosa si careciera de satisfacción sensual? ¿No nos resultaría poco envidiable la vida de los propios dioses sin este don?” Partridge nos informa que, en general, “en todos los niveles intelectuales, la gente reconocía el papel esencial del materialismo voluptuoso en los asuntos humanos”, de donde se puede colegir con mucha facilidad lo muy profundamente que el hedonismo había calado en el corazón del mundo griego. ¿La razón? Burgo Partridge arguye que una de los motivos de este sensualismo generalizado reside en el hecho de que “los griegos... (habrían sabido) lo que casi nadie acertó a ver a lo largo de los siguientes dos milenios: que el deseo pasajero por A no era incompatible con el amor más permanente por B” Un ejemplo de esto nos lo entrega la Odisea de Homero, en la que se narra una escena muy peculiar. Según esta, Afrodita, que se habría abandonado a los placeres de un ilícito amor con Ares, no habría recibido de Hefestos, su marido, ni tampoco del resto de los dioses que habrían presenciado la adultera escena, ninguna reprobación moral, ni ningún otro tipo de condena de esta naturaleza. Antes bien, los dioses griegos habrían gastado unas cuantas bromas con la infidelidad de Afrodita, unos cuantos sarcasmo y una que otra risa. Ahora bien, lo que aquí va a aparecer bajo la palabra religión no debe entenderse al modo cómo se entiende la religión hoy por hoy en occidente. Partridge nos ilustra, un poco, acerca de qué es esta religión de los griegos cuando dice: “en el pensamiento griego, el amor y la belleza estaban íntima e inextricablemente ligados. Más que cualquier otra cosa eran motivo de alegría y gratitud, por la expresión sencilla y entusiasta de las emociones”. La religión, se sigue de aquí, es una forma de religarse a través de la sensualidad (el amor como fiesta de los sentidos), la belleza, la alegría y la gratitud a los dioses por habernos dado tantas y tan buenas cosas. No era esta expresión de martirio y sufrimiento, de abstinencias y penitencias que llegó a ser más tarde con la judeahización del occidente pagano. Incluso la filosofía, en algunos casos llegó a ser expresión de esta sensual forma de entender y comprender el mundo. A este respecto, Partridge nos dice que “la filosofía del placer como auténtico objetivo en la vida recibió el respaldo de toda una escuela filosófica, la de Aristipo de Cirene, que demostró su adhesión con sus prácticas y tuvo como amante a Laís, eminente hetera de la época”. En otra parte, Heráclides Póntico “en su ensayo Sobre el Placer afirma que la lujuria como actitud vital es una prerrogativa de las clases gobernantes, mientras que el trabajo y el aburrimiento son el destino de los pobres y de los esclavos. De hecho, según este ensayo, quienes valoran la sensualidad y la lujuria son de carácter superior a los que no lo hacen”. ¿Se sigue de esto que los griegos hayan sido un pueblo aristocrático por excelencia? Pese a todas estas consideraciones, el autor permanentemente hace referencia a las orgías como “válvulas de escape”, “descarga de tensión organizada... liberación de histeria acumulada por la abstinencia y la contención...”, etc., lo cual, podría representar un principio de contradicción, cuando no de incomprensión, si ha definido ya antes a los griegos como una cultura con una privilegiada disposición al placer. Lo que resulta raro es que se hable de “válvulas de escape” allí donde, al mismo tiempo, se dice que hay una relativa familiaridad con el placer y en donde la libertad de un modelo de vida hedonista es incluso promovida por las instituciones. El alegato de las “válvulas de escape” suena más propio para sociedades más bien compungidas y sometidas a un estricto y represivo control de su sexualidad, más característico de sociedades como la puritana o la victoriana. Sin embargo, puede ser que por la abstinencia y la contención sexuales que los griegos se auto-imponían, de acuerdo con la opinión del propio autor (pues, según éste, la sabiduría de los griegos los impelía a pensar la sexualidad con intervalos considerables de reposos, para aumentar el goce y la satisfacción que de ello se deriva), el concepto de “válvula de escape” se justifique en algo. Pero aún así, sigue sonando raro eso las “descargas de tensión”, pues psicológicamente hablando -y esto, incluso, podría tener validez para una cultura como la griega, guardando todas las reservas que la distancia histórica nos impone- es casi seguro que una contención de la sexualidad autoimpuesta no haya sido la misma cosa -esto es, no haya sido experienciada de la misma manera- que una contención impuesta desde afuera con mano de hierro, como suele decirse, ocurrió con los puritanos del siglo XVII y los victorianos del siglo XIX. Las heteras, más bien sacerdotisas del culto hedonista que simples prostitutas, jugaban un rol sumamente importante en las rutinas orgiásticas de los griegos. Su oficio, en ese sentido, podría muy bien ser considerado una forma de prostitución consagrada antes que una prostitución característica del mundo civilizado moderno. Ellas “...eran admiradas por sus cualidades intelectuales tanto como por las físicas” y muy a menudamente se les “...reclutaba para que participasen en el culto de Afrodita”. Las heteras participaban mayoritariamente en las orgías que se organizaban con motivo del culto a la diosa Afrodita. Estas orgías se conocían con el nombre de afrodisias y algunos testimonios de ellas en la antigua Grecia nos ha llegado a nosotros a través de los relatos de Burgo Partridge. Las afrodisias eran festividades orgiástico-religiosas que se celebraban en todo el territorio griego y “...raras veces faltaban a ellas las heteras y las prostitutas”. De acuerdo con Luciano, las orgías afrodisias que se celebraban en Biblos, en el gran templo dedicado a Afrodita, eran sumamente habituales. Algunas de estas afrodisias son descritas del modo que sigue: A. En primer lugar, hallamos las orgías de Corinto. Sobre éstas, Partridge nos dice que “existe en la ciudad la costumbre de atraer, cuando ofrece sus plegarias a Afrodita, el mayor número posible de heteras para la gran procesión, y ellas rezan a la diosa y están presentes en los sacrificios y el banquete sacrificial” B. Estrabón escribió sobre el templo dedicado a la diosa Afrodita Porne en Corinto: “El templo de afrodita era tan rico que podía mantener a más de mil heteras, dedicadas a la diosa por hombres y mujeres. Estas jóvenes atraían a tantos extranjeros que la ciudad se enriqueció gracias a sus visitas” C. En las afrodisias de Egina, una festividad especialmente creada para la participación de las heteras, Friné destacaba como la más hermosa entre todas ellas. Ateneo nos cuenta que “...Apeles la usó como modelo para su famosa Afrodita Anadiomene” D. Partridge nos informa que “las numerosas prostitutas de Corinto celebraban las afrodisias a su propio modo lascivo y bullicioso. La ceremonia conocida como pannychis..., proseguía a lo largo de toda la noche. Aunque religiosa en teoría, en la práctica era poco más que una juerga promiscua y lasciva” E. La festividad en nombre de Afrodita Anosia, que se celebraba en Tesalia, también tenía un carácter altamente lascivo, sólo que estaba dedicada para participantes exclusivamente mujeres. F. Casi todas las afrodisias se llevaban a cabo en primavera. Partridge nos cuenta que “en Chipre... se instauró en la playa de Pafos, lugar del nacimiento de la diosa, la más célebre y lujuriosa de sus ceremonias. Muchachas jóvenes bañaban amorosamente la efigie de la diosa en el mar y la adornaban con flores antes de bañarse ellas mismas en arroyos cristalinos que corrían entre matas de mirto sagrado y hondonadas cubiertas de almendros floridos, en preparación para las inminentes orgías de amor” Las dionisias, festividad estrechamente ligada con el culto al dios romano Liber, constituyen la otra forma de fiesta orgiástico-religiosa de la Grecia de la antigüedad. Había muchas formas de festividades dionisias en toda Grecia. Algunas de las más importantes son: A. Las leneas: esta fiesta, también llamada “fiesta de los lagares”, es una dionisia “caracterizada por la celebración de un gran banquete..., y por la procesión de gente disfrazada que recorría la ciudad entera, acompañada de bromas groseras de todo tipo, principalmente de carácter erótico” B. Las elafebolias: también llamadas dionisias urbanas, esta festividad se llevaba a cabo entre los meses de marzo y abril. Pese a que eran fiestas en honor de Artemisa, la diosa de la caza, “en ellas, unos coros cantaban ditirambos en honor de Dionisio, hermosos efebos ejecutaban danzas y, por la tarde, la gente sacaba sus triclinios a la calle y allí bebía hasta emborracharse. Siempre había uno o más falos como parte de la diversión”. C. Partridge señala que “en determinadas regiones de Grecia, sobre todo en Citerón, Parnaso y las islas, se celebraban dionisias especiales, en las que sólo podían participar las mujeres y las muchachas. Por la noche, vestidas con atuendos báquicos y pieles de cabra, despeinadas y portando instrumentos musicales, subían a la cima de la montaña más cercana donde, estimuladas por la actividad inusual y por el vino, al que no estaban acostumbradas, ejecutaban danzas y sacrificios que adquirían rápidamente un carácter orgiástico” D. Las tíadas, mujeres que acudían cada año junto con las mujeres de Delfos al monte Parnaso, tenían la costumbre de celebrar allí fiestas orgiásticas en honor del dios Dionisio. También en la cueva Coricia, nos informa Homero, las tíadas se desenfrenaban en honor de los dioses Dionisio y Apolo. Es preciso decir que las dionisias diferían, sustancialmente, de la naturaleza de las festividades de la fertilidad, tan ampliamente conocidas Las dionisias eran fiestas religiosas que ponían en comunión a los hombres con sus divinidades. De acuerdo con Partridge, toda actuación que pudiera sacar a los griegos de su rutina e instalarlos de improviso en lo insólito -motivándoles a actuar de una manera alterada e inusual-, era atribuida a la posesión de algún dios. Las orgías, en este entendido, suponían una festividad en el sentido antiguo de la palabra -esto es, en el sentido de una irrupción del tiempo sagrado (el no-tiempo propiamente hablando) en el tiempo profano, en el que todas las ligaduras, en este último presente, desaparecen-. Es el tiempo de lo insólito y lo inusual, en el que la representación y tiranía de lo cotidiano se anula para dar lugar al tiempo extraordinario de la igualdad y la libertad. Poseídos por los dioses, única explicación que el griego antiguo puede hallar a su excepcional condición temporal, vincula su animosidad orgiástica a la divinidad, dotando a la orgía, de este modo, de una condición religiosa que no va a volver a aparecer por mucho tiempo en occidente. Junto con las afrodisias y las dionisias los griegos celebraban los misterios de Eleusis. “La ceremonia duraba nueve días y no es fácil determinar su naturaleza con exactitud. La idea subyacente guardaba relación con la muerte y el renacer de los cereales, pero también con nociones vagas de la inmortalidad humana”. Partridge caracteriza las ceremonias de Eleusis del siguiente modo: “Los primeros días de las festividades se dedicaban a procesiones, baños rituales y purificaciones en el mar, no siempre llevados a cabo con modestia y decoro. El sexto día, una procesión partía de Atenas rumbo a Eleusis. Los participantes, que se contaban por millares, llevaban coronas de mirto y hiedra, y portaban antorchas encendidas y mazorcas. Una vez en Eleusis, situada a casi quince kilómetros de Atenas, el tiempo restante destinado a las celebraciones se consagraba a actividades ruidosas, alegres y esotéricas, por mucho que Titinio las califique sin rodeos de incestuosas. La mayor parte de los ritos dedicados a la copulación ceremonial y demás prácticas orgiásticas implicaba también periodos de abstinencia”. Un ejemplo de esto son las festividades conocidas con el nombre de tesmoforias. Estas han llegado en gran parte hasta nosotros gracias a Aristófanes. “En las tesmoforias... ‘todas las mujeres que deseaban participar tenían la obligación de abtenerse de todo contacto sexual durante los nueve días precedentes a la celebración. La sagacidad de los sacerdotes presentaba este requisito como un acto de piedad, siendo, por descontado, la verdadera causa la entrega sin reservas de las mujeres a las orgías eróticas tras tan larga abstinencia. Para fortalecerse y poder observar la castidad que se esperaba de ellas y que, sin duda, encontraban difícil de guardar, las mujeres cubrían sus lechos con hierbas y hojas refrescantes, especialmente agnocasto (λυγος αγυοζ) y otras plantas (como χνεωρον, χονυζα)’”. Partrifge señala que “era, no obstante, en honor de Afrodita que se celebraban las fiestas más esplendidas, populares y disolutas. Era Afrodita quien ofrecía a los griegos y a sus dioses las delicias del amor”. De donde se concluye que eran las afrodisías las fiestas más propiamente lujuriosas que se pueden hallar en la antigua Grecia. Esta opinión nos merece una reserva, aunque no esta totalmente zafada de la realidad (habría que investigar un poco más al respecto). Las diferencias que, siguiendo a Partridge, parecen haber entre las afrodisías, las dionisias y los misterios de Eleusis radican en que mientras las primeras no eran oficialmente reconocidas por la Ciudad-Estado, tanto las dionisias como las festividades de Eleusis eran no sólo reconocidas, sino que ampliamente difundidas, patrocinadas y financiadas por la Polis. Ahora bien, entre las dionisias y las fiestas de Eleusis la diferencia pareciera hallarse en el grado de profundidad religiosa y trasfondo metafísico de la última con respecto a la primera. Esto no está lo suficientemente claro todavía para mi. Pero puestas las cosas como han sido puestas hasta acá, pareciera ser que esas son las grandes diferencias entre unas y otras. Por lo que respecta a las similitudes, cabe destacar que el autor, independientemente de las diferencias, marca con notable intensidad que todas estas festividades suponen un vehículo de experiencia religiosa y enaltecedora. Aparte de estas festividades orgiástico-religiosas encontramos en la Grecia otro tipo de orgías que no tenían que ver tanto con la religión, esto es, que no tenían en principio ni una justificación ni un sentido religioso sino social. A éstas, Partridge prefiere llamarlas danzas eróticas, y dice de ellas que estaban muy extendidas y muy generalizadas por toda Grecia. Las más famosas eran las danzas Sicinis y las danzas Cordax. Las primeras correspondían a los dramas satíricos llevadas a cabo por Sátiros, y las segundas eran más bien danzas irreverentes que se correspondían con las comedias. En todas estas danzas eróticas, así como también parece serlo de las orgías, hay un elemento común tremendamente importante: la música. Está se halla representada fundamentalmente por el papel que tanto en las danzas, los banquetes y otros tipos de festividades similares jugaban la flauta y las flautistas. Partridge nos dice, siguiendo el testimonio de Teopompo, que “...algunos Tesalios ‘pasan toda su vida en la compañía ininterrumpida de bailarinas y flautistas, mientras que otros dedican el día entero a los juegos, la bebida y demás formas de disipación...’” Algunos ejemplos de estas festividades eróticas, juegos y otras anécdotas de la sensualidad griegas las paso a relatar a continuación. Respecto de los juegos, las danzas y los banquetes eróticos, aparte de las danzas Sicinis y las danzas Cordax, las fuentes nos hablan de: 1. Los juegos en honor del héroe Diocles en Megara, donde, “entre otras competiciones, había un concurso de besos para hermosos efebos...” 2. En Esparta se celebraran de forma anual, las gimnopedias, en la que muchos efebos danzaban desnudos y realizaban ejercicios gimnásticos en honor de los soldados caídos. 3. Las oscoforias, que se celebraban entre los meses de noviembre-diciembre consistían en una fiesta en la que “...dos hermosos efebos vestidos de mujer portaban los oscoi, o ramas de vid cargadas de uvas, que daban nombre a las festividades” Las anécdotas son, ciertamente, mucho más prolíficas y decidoras de eso que hemos llamado el particular modo griego de concebir el mundo. Algunos ejemplos de esta son: 1. “El orador Lisias cuenta la siguienta historia de Alcibíades y Axioco: ‘Zarparon juntos hacia el Helesponto y los dos se casaron en Abidos con Medontis de Abidos y cohabitaron con ella. Más tarde nació una niña, y ambos declararon que no sabían cuál de los dos era el padre. Cuando la niña alcanzó la edad del matrimonio, cohabitaron también con ella. Cada vez que Alcibíades disfrutaba poseyéndola decía que era hija de Axioco; cuando la poseía Axioco afirmaba que era hija de Alcibíades’”. 2. En el culto griego, a diferencia del de los romanos, las divinidades eran representadas de diversas formas, según el peculiar sentido que quisieran darle al dios. Así, no había una unívoca representación de Afrodita, por ejemplo, sino que, por lo menos había unas cuantas. Afrodita Porne, Afrodita Anosia, Afrodita Anadiomede, entre otras muchas. De aquí la surge la anécdota, según la cual, la razón por la que se erigieron también estatuas en honor de Afrodita Calipigia, se hallaba en la profunda predilección que los griegos habrían sentido siempre por las nalgas. La anécdota versa así: “un campesino tenía dos hijas muy hermosas que un día se enzarzaron en una discusión sobre cuál de las dos tenía las nalgas más bellas, y salieron a un camino para sanjar la cuestión. Pasó un joven, hijo de un anciano muy rico, y le descubrieron sus encantos. Él, después de contemplarlas detenidamente, votó a favor de la hermana mayor; de hecho, se enamoró de ella tan perdidamente que, cuando volvió a la ciudad, cayó enfermo y contó lo sucedido a su hermano, que era más joven que él. Éste decidió ir al campo a ver a las muchachas y también se enamoró de una de ellas, la más joven. El padre intentó convencerles de que contrajeran matrimonio con mujeres más respetables pero, viendo lo inútil de sus esfuerzos, y habiendo obtenido el consentimiento del padre de las muchachas, las mandó traer del campo y las desposó con sus hijos. Los habitantes de la ciudad las llamaron “las bien nalgadas”, como relata en sus versos yámbicos Cercidas de Megalópolis...” 3. El decoro también era algo bien evaluado entre los griegos. Había lujuria y sensualidad, pero también era importante la elegancia y la belleza. Las formas y ademanes groseros, ciertamente, estaban ex-patriados de la Grecia de la antigüedad. Un ejemplo de ello es la anécdota que nos narra Luciano. Dice él: vi a un joven y bello esclavo, al que habían asignado funciones de copero, apostarse sonriente detrás de Cleodemo, y quise averiguar por qué. Quedé observándolo atentamente y, cuando el bello Ganímedes se le acercó de nuevo para retirar el cáliz de Cleodemo, vi que éste le acarició el dedo y, según me pareció, depositó en su mano un par de dracmas junto con la copa. El muchacho sonrió al recibir la caricia, pero tuve la impresión de que no reparó en las monedas. En consecuencia, los dos dracmas cayeron tintineando al suelo, y tanto el filósofo como el muchacho se ruborizaron intensamente”. De acuerdo con Partridge, el rubor de Cleodemo se explica, en parte, por dos razones: “su incapacidad, siendo filósofo, de dominar sus emociones y el hecho de mantener una relación con un esclavo” 4. Se cuenta que “cuando Alejandro Magno derrotó a Darío, entró en Babilonia... y luego marchó contra Persépolis... se celebró un espectáculo en el que una multitud de heteras tuvieron un papel prominente a la vez que desastroso, dominadas e impulsadas por Thais... quien sugirió incendiar el palacio real, quien a paso de danza bacanal lideró a los incendiarios borrachos al son de flautas y cantos, y quien arrojó la primera antorcha” 5. Otra anécdota nos la proporciona Heráclides Póntico. En su libro “...nos dice de Temístocles que ‘cuando los atenienses todavía no eran adictos a las juergas y las prostitutas, (él) uncía cuatro cortesanas a un carro y las conducía a través del ágora en las horas de mayor afluencia’”. Los banquetes, todavía más famosos que las otras formas de disipación, también nos informan un poco acerca del modo griego de vida. Entre algunos de ellos Partridge nos cuenta lo siguiente: 1. De acuerdo con Teopompo, “...Estratón, rey de Sidón, ‘sobrepasaba a todos en lujuria y placer (...). Estratón (...) Celebraba fiestas en compañía de muchachas flautistas, cantoras y arpistas... Acompañado de amigos varones, tenía la costumbre de organizar competiciones para ellas y pasaba todo su tiempo a su lado, ya que...era un esclavo de su lujuria...’”. Según Partridge, una de las razones más poderosas de Estratón para organizar esos sendos banquetes y orgías era rivalizar con Nicocles acerca de cuál de los dos era capaz de mayor lujuria, placer y comodidad. 2. Cotis, rey de Tracia, le gustaba ofrecer banquetes al aire libre en sus peregrinaciones por el país. 3. Según Partridge, “Cares, general ateniense, solía llevar consigo en sus campañas a flautistas, arpistas y prostitutas, y destinaba una porción del presupuesto para la guerra al mantenimiento de este séquito, además de enviar otra parte de vuelta a Atenas para financiar los placeres de ciudadanos particulares y para uso de individuos insolventes, pendientes de juicio. Esto, naturalmente, le valió una enorme popularidad entre los ciudadanos, según Teopompo ‘porque ellos llevaban una vida similar (a la de Cares), y así los jóvenes pasaban el tiempo en compañía de flautistas insignificantes y en casas de prostitución, mientras que los mayores se entregaban al alcohol, el juego y excesos por el estilo. La población en general derrochaba más dinero en los banquetes públicos y la distribución de la carne que en la administración del Estado” Hay, todavía, un par de cosas que decir. Estas están referidas al concepto de familia que parece seguirse de las informaciones aportadas por Partridge y también a las formas cómo se manifestó entre los griegos la bi y la homosexualidad. En primer lugar, la familia no parece ser para los griegos el núcleo de su sociedad, ni lo más importante, ni el lugar tampoco en el que se despliega la forma más importante de la sexualidad. Algo de esto parece sugerir la diferencia que Partridge establece entre la mujer madre y la mujer prostituta, únicas dos formas cómo los griegos concibieron a la mujer en la antigüedad. La mujer madre, al parecer, no es fuente de goce ni de sensualidad -al menos no es la más importante, ni la primordialmente asociada con estas nociones- sino que ella es más bien el instrumento de la procreación, de la proyección de la especie, guardadora del hogar, la educación de los hijos y de todas las funciones domésticas que supone una familia. Partridge dice que “la esposa es inadmisible como compañera de lecho precisamente porque es la esposa y, además, la persona que cumple las funciones de madre y ama de casa”. Y en otra parte nos dice: “para los griegos, el lugar de la mujer estaba en su casa, y su función era la de madre y esposa”. Y aunque el adulterio era ampliamente tolerado para las mujeres, lo era infinitamente más para los hombres, pues se creía que por naturaleza el hombre tenía una disposición aún mayor a la poligamia. Sin embargo, si el adulterio se producía de parte de los hombres, era mucho más tolerado que la mujer, objeto de esta aventura extramarital, “...no fuera libre de nacimiento ni esposa de otro hombre”. Había, pues, una tajante diferencia entre mujeres respetables o mujeres madres y cortesanas o prostitutas. Esto es, de mujeres que juegan en la vida de los hombres el rol de madres y esposas, por un lado, y el rol de cortesanas y prostitutas, por el otro. La función propiamente orgiástica y sensual, aquella donde la lívido y las pasiones del amor, la lujuria y el desenfreno se desataban, la cumplían en la antigua Grecia las heteras y las prostitutas; la función social de la familia la cumplía la madre y la esposa. Aunque ambas eran importantes para la sociedad de la Grecia antigua, no cabe duda que las primeras desempeñaban un rol mucho más relevante, por la importancia que los griegos atribuían al placer y esas cosas. Sobre el tema de la bi y de la homosexualidad, Partridge nos dice que, al parecer, los griegos habrían sido “...perfectamente consciente de la naturaleza andrógina de los seres humanos... (y por esa razón) con sorprendente frecuencia encontramos relatos sobre hombres de costumbres viriles y preferencias aparentemente heterosexuales que aparecían en público vestidos de mujer” Las fiestas en Amato, en la isla de Chipre, en que se adoraba a un dios que era varón y hembra a la vez, da clara cuenta de este hecho. Entre las historias de personajes aficionados a travestirse con las que contamos de la antigua grecia, hallamos los nombres de Andrócoto de Frigia, Sagaris el mandarino, Jenócrates de Calcedonia y tantos otros.

RELATO: MI FANTASIA


Son las 6 de la tarde de un viernes como cualquier y en lo que puedo pensar es en el hecho de que al salir, de esta agonía y tedio; solo me espera mas de lo mismo. Faltando una hora para salir de trabajo. Sentada frente a la computadora comienzo a enlistar las posibles cosas que aguardan en la aburrida noche de hoy, haciendo lo mismo en casa, ver películas, chatear, cenar, en fin nada extraordinario.
Atenta al ajetreo de mis compañeros al comentar sus planes para en la noche, sobresaltada por una canción de rock pesado bastante fuerte, percibo que es mi celular sonando.
-¡neneeeeeeee! ¿Como estas?, que milagro- es Daniel, un amigo de la prepa con el que aun mantengo contacto.
-que onda nena, ¿tienes planes para hoy?” – “pues nada en especial, llegar a casa ver pelis, en fin algo aburrido, porque?” lo digo con un tono melancólico presintiendo que por fin habría algo que hacer. Me dijo que Nelson estaba organizando una reunión, carne asada, mucha cerveza y vino, partida de póker, en fin acepte encantada antes de que terminara de hablar.

Fui al baño a retocarme el maquillaje emocionada, un poco de rímel, rubor en las mejillas, labial rojo carmesí (este color me fascina pues con el color de mi tez, blanco como la leche y mi cabellera negra contrasta de maravilla, parezco toda una femme fatale). Perfecta, me veía perfecta, deslumbrante diría yo, y en tan solo unos minutos.

Llegue a casa de Nelson. El ambiente olía a carne y papas asadas. Atravesé la casa por un sendero de grava gris y en el jardín vi a la pandilla de siempre. De pronto repare en que habían dos personas, un chico y una chica, que no reconocía, a lo cual le pedi a Diego que nos presentara.

.- “Hola me llamo Cathy”-.

.- “Mucho gusto, mi nombre es Christian” -. Esto último lo dijo en un tono muy sexy, que me produjo un escalofrió, y me percate en su forma de mirarme, lentamente de arriba abajo y me lanzó una sonrisa lasciva y complaciente con lo que veía, su mirada sugerente me hizo estremecer un poco de deseo.

Christian era alto, delgado, cabello largo rubio y con unos ojos miel perturbadores y Cathy exactamente igual a él, pero con el cabello más largo y rizado y no pude evitar posar la mirada en su pecho, grande, redondo, que cada vez que se reía se movían como unos deliciosos e invitadores flanes, (siempre me ha gustado ver el busto de las chicas lo admito), y unos ojos café impactantes. Más tarde supe que eran gemelos y conocieron a mis amigos en el Gotcha.
Acabada la comida, continúo el póker. Nos sentamos a la mesa y Daniel repartió las cervezas y Diego las fichas.

.- La entrada es de cincuenta y subiendo -.

Me sentía tranquila y feliz, ligeramente embriagada. 2 horas después, Nelson ganaba y ya nadie tenía dinero, comenzaba a tener un calor terrible provocado por la bebida. Estaba eufórica.
.- Apenas es muy temprano y ya nadie tiene dinero, que hacemos?.- dijo Daniel. Supuse a lo que quería llegar. Ya lo conocía.
- Yo todavía tengo para rato, pero no dinero jeje.- dijo Diego.
- Y si jugamos de prendas?.- dijo Cathy riendo, pensando que todos iban a hacer lo mismo por su estupenda idea, pero nadie lo hizo.
- Me parece excelente Cathy- exclamó Christian echándome una mirada que penetro hasta mi alma, me puse caliente.
.-Vale, me gusta la idea, pues ya no quiero perder más dinero-. argumente.

Todos estuvimos de acuerdo y empezamos la partida. Ya he estado desnuda frente a mis amigos, por juegos o apuestas y nunca ha pasado nada, pero con desconocidos era distinto era excitante y con copas encima y el calor que tenia acepté.

- Jaja 4 ases, que racha llevo.- vaya suerte que tenía. Hasta el momento no había perdido más que el saco, iba ganando, lástima que no fuera dinero.

Mis amigos estaban en bóxers, Christian con bóxer y playera y Cathy solo había perdido la blusa y estaba en sujetador, muy bonito por cierto, azul turquesa con encaje rosa y unos moñitos coquetos. Pero todo dio un giro de 360, comencé a perder la camisa y después la falda, y de pronto todos estábamos en ropa interior. El ambiente se sentía ligero, agradable, todos riendo y sin importar que estuviéramos casi desnudos. Decidimos cambiar de juego. Seguíamos tomando en la sala cuando Nelson saca el “twister”, ya saben el juego donde tienes que poner la mano derecha en azul, pie izquierdo en verde y se hace un revoltijo de gente hasta que todos se caen.

-.PAMELA, MANO DERECHA AMARILLO.- todo mi cuerpo afuera y solo la mano en el tablero.
.- CATHY, PIE IZQUIERDO VERDE-. Hizo un movimiento delicado y posó su pie en el tablero. Como estaba agachada pude observar su pierna, perfectamente delicada y con un tono grisáceo, pues la luz del cuarto estaba semiobscuro. Y así seguimos, Daniel mano izquierda en rojo, Diego en verde, Christian amarillo; total un revoltijo delicioso pues detrás mío estaba Diego, con un pie delante de mí y el otro atrás, teníamos una postura de perrito y yo le brindaba mi esplendida retaguardia y mi cuerpo girado 90 grados se encontraba junto a la cara de Christian y delante de mí en cuclillas pero mostrándome el trasero estaba Cathy y ella tenía a cada lado de su cara las pollas medio erectas de Christian y de Daniel, pues les recuerdo que todos estábamos en ropa interior. Aunque Daniel estaba de pie tenía una postura un poco incomoda pues su pierna derecha se encontraba por detrás de Diego y la izquierda abajo del cuerpo de Cathy; y Christian tenía una mano en amarillo detrás de la pierna de Cathy y las dos piernas por delante de ella. Nelson movía lentamente las manecillas como observador y nosotros, al gritarle que se apurara, pude observar que tenía una tremenda erección y una cara desencajada por el placer de vernos en esas posiciones. Yo creo que todos pensamos lo mismo porque instintivamente comenzamos los acercamientos.

Sentí una mano cálida por detrás, arañando mi espalda muy lentamente hacia abajo, me estremecí, tocando mi redondo trasero, cerré los ojos. Al abrirlos me encontré con Chris, mostrándome una sonrisa brillante a pesar de que no había mucha luz y arqueando las cejas de una manera endemoniada, nos besamos. Era una delicia sentir sus labios carnosos y la lengua arremetiendo por todos lados delicadamente. Oí un gemido. Era Daniel que se había sacado la polla de entre el bóxer, firme y dura en dirección a la boca de Cathy, esta capto y comenzó a chuparla muy lentamente por todos lados, sin dejar su posición claro está.

Era una regla. Podíamos hacer lo que quisiéramos sin movernos de lugar. Yo estaba realmente húmeda. Afortunadamente tenía una mano libre que estire lo más que pude para alcanzar la masculinidad de Chris. Un gemido. AAAHHHH!!!!!. Era mío, al percibir como se movía mi tanga y sentir el embiste por detrás con la polla de Diego.

.- Perdona la rapidez, pero estoy muy caliente, ya no aguantaba -. Me dijo con una voz de ultratumba muy seductora.
.- Ten más cuidado… no me quiero perder tan rápido-. Argumente entre gemidos, el comprendió y siguió su ritmo.

No lograba alcanzar lo suficiente a Chris, me lamenté, pues al sacar su polla comprobé que esta era dura, larga y muy gruesa, exquisita, pero lentamente descubrí el hermoso derriere de Cathy en todo su esplendor, que animadamente movía al saber que estaba ahí. <> pensé. Nunca lo he hecho con una mujer pero es que era tan deliciosa, tan blanca, tan suave y tersa, muy firme y con la poca luz le daba una apariencia exótica. La toque suavemente, le amase el trasero como pan, <>, la recorrí toda pasando un dedo por su ano y se estremeció; lo volví a depositar en esa pequeña parte y comencé a deslizarlo hacia abajo, hasta su femenina cavidad, sentí sus labios y les di un estirón suave, se lo introduje. <> advirtió mi mente. AAAAHHHHHHH!!!! Otro embiste y otro y otro, rápidos y suaves, con un miembro caliente y palpitante tratando de partirme en dos. Me percate de Cathy, había girado su cabeza para encontrarse con la polla de su gemelo. No lo pensó y se lo metió en la boca, Daniel la agarro de la cabeza y la subía y bajaba masturbándolo. Nelson se masturbaba observándonos.
ALTOOOOO-. Grito Nelson. Todos excitados nos detuvimos y miramos.

- PAMELA TANGA NEGRA -. Gimió.
- Pero si me muevo pierdo.- argumente.
- Vale nueva regla. Se vale moverse para quitarse la prenda y regresar a su posición pero….alguien más se la tiene que quitar-.
- Ok -. Exclamamos todos al unísono.

Diego me bajo lentamente la tanga, acercando su cara a mi trasero, lamiéndolo leeeennntamentee, levantándome una pierna y luego la otra para quitármela. Afuera.

-DANIEL BOXER AZUL-.
Cathy se lo quitó, usando primero su boca, restregándose la polla endurecida y dándole un beso, uso una mano y lo saco.

-DIEGO BOXER NEGRO-.
Agachada, levante mi trasero, acomodando una mano en el suelo como apoyo y pasando la otra ente mis piernas abiertas alcance su bóxer, lo masturbe un momento, le apreté dulcemente los huevos y les di un estirón, jale el bóxer recorriendo sus piernas y salió.

-CATHY TANGA AZUL-.
Su gemelo se acerco a ella y comenzó a lamerle el trasero y con la boca comenzó a bajarlo a media rodilla, lamiéndola, estiró la mano que tenia atrás de su espalda y le bajo las bragas. Pero aprovecho el momento y le metió dos dedos en su coño, los saco, retiro la tanga por completo y se lamio los dedos.

-CHRISTIAN BOXER BLANCO-.
-DEMONIOS….NO HAY NADIE AL ALCANCE MAS QUE DANIEL-.grito furioso
-NI MODO CABRON, ALIVIANATE JAJAJA-. Dijo Daniel riendo y le quito el bóxer rápidamente.
-NO TE PREOCUPES HERMANITO-. Le dijo Cathy con una vos tan melodiosa y le dio un besito en su miembro.
De nuevo todos al ataque. Embestidas rápidas, lamidas y mamadas por doquier.
AAAAAAAAYYYYHHHHHH NO ES JUSTOOOOO-. Grite al caerme de la posición. En un embiste brutal caí al suelo. Mierda he perdido. <> pensé.
Todos riendo y ente vítores Nelson exclamo: bien bien ah estado muy bien pero….que comience el castigo.-.

Trajeron un colchón inflable, arrimaron la sala al rincón y lo pusieron en medio. Observe que no era un colchón ordinario. Noooo. Tenía amarres de cuero en cada esquina y una almohada en medio de este.
- Acuéstate Pam-. Dijo Dany con una cara de felicidad.
Me tumbe boca arriba con cada integrante en las esquinas. Se arrodillaron y me amarraron pies y manos. Trataba de resistirme, hacerles creer que no me gustaba ese juego, poniendo resistencia, pero al final cedí. Adoro ser amarrada y sometida.
-OK, que comience el ritual jajaja-. Dijo Diego.
Nelson se acomodo en medio de mis piernas abiertas. Lamio mi coño extraordinariamente bien sin dejar a un lado mi clítoris, al que arremetía con pequeñas mordidas casi imperceptibles pero que mi cuerpo agradecía. Espasmos de placer se dispersaban por doquier. Masajeaba mis muslos y con un dedo enorme me penetró. OOOHHH DIOS….PARECE UN PENE ESE DEDOOO-. Gemí y todos rieron. Metía y sacaba y yo arqueada de placer. Se detuvo en seco. Yo totalmente mojada. - No quiero que te vengas….aun -. Puntualizó.
Cathy se abrió de piernas, se coloco encima de mi pie izquierdo y bajo hasta ser penetrada por un dedo. Se masturbaba con él. Era muy estimulante verla así, mostrándome su coño con el vello púbico rubio.
Daniel se puso en mi mano derecha –MASTURBAME – me grito lleno de éxtasis. Lo hice.
Diego se puso encima de mi pecho hinchado, con su polla deliciosa apuntando hacia mi boca. Tenía un piercing en el glande. – CHUPALA – lo hice gustosa, de arriba para abajo, en círculos, mordiéndolo suavemente, pasándolo de un lado a otro dentro de mi boca, masturbándolo con pasión.
El único que faltaba era Christian, aaaahhhh como deseaba sentirlo dentro de mí, esa verga grande y deliciosa, pero no era el momento. Se coloco al igual que Daniel para que lo masturbara y me levantaba la cabeza para ayudar a que la polla entrara por completo hasta mi garganta.
Que sensación, que emociones tan indescriptibles de placer me acometían, todo mi cuerpo estaba siendo usado, hasta los dedos de mis pies, sintiendo los movimientos circulares y la humedad de Cathy.
Nunca había estado en una situación como esa. Era maravilloso, soy adicta al sexo pero nunca lo había realizado de esta manera, siempre lo convencional. Sentía venirme a chorros al percibir lo que pasaba a mí alrededor. Nelson penetrándome con su dedo, el olor fuerte pero exquisito del sexo de Diego en mi cara, masturbando los esplendidos penes de Christian y Daniel, percibiendo su liquido goteando entre mis dedos, húmedo y caliente; y Cathy gozando con mi dedo del pie, totalmente caliente por la fricción y goteando su lubricación.
De pronto todos se detuvieron al unísono, como si ya supieran lo que tenían que hacer en cierto momento.
Nelson me agarro por la cintura y me levanto hasta que sacaron el cojín y Diego se acomodo debajo de mí. Me soltó y sentí su miembro caliente y húmedo, por la saliva, entre mis nalgas, humectándolas de en medio. Laura se hizo con ella y el lamio, pasando de vez en cuando su lengua seductoramente por mis partes. Separo mis piernas e introdujo lentamente el miembro palpitante en mi húmeda caverna. Baje la espalda y lo sentí completo. Diego comenzó a subir y a bajar a un ritmo cadencioso al principio luego con arremetidas bestiales y abrumadoras. Me sentía en el cielo.
-AAAAHHH ME VOY A VENIR – dije entre oleadas de placer.
-FFFFUUUUAAAA – un cinturonzazo a mis costillas.
-QUE PASAAAA??? PORQUE ME PEGAS DANIEL – me quejé.
-Cada vez que te vayas a venir te pegare, no tienes permitido hacerlo- exclamo Daniel con regocijo.
<> pensé con descontento.
-Pobrecita nena, te duele mucho??- me dijo Cathy con una voz tranquilizadora y comenzó a besar mis costillas con sumo cuidado que volví a encenderme. Recorrió mi lengua por mi abdomen y comenzó a masajearme los pechos como moldeando una pelota de plastilina, retiro una mano y me lamio un pezón. – Pero que duros los tienes Pam – sus dedos delicados frotaban mi pezón endurecido haciéndolo circularmente y con la palma tanteando lo demás; su lengua amenazante por toda la aureola y dando unos mordiscos ligeros y junto a mis espasmos lograba llegar al clímax de nuevo.
-FFFFUUUUAAAA- de nuevo el cinturón, ahora en un muslo.
-Lo siento, pero vi tu cara, te delataba – dijo Nelson.
Diego continuaba arremetiendo.
-No aguanto más – masculló Daniel. Se puso delante de mí y le susurro algo al oído a Cathy.
Esta se levanto, avanzando por la sala apagó las luces. No se veía absolutamente nada salvo por la luz tenue que proporcionaba la luna, de una mochila saco varias velas y un lubricante. Las incendió una por una con ayuda de Christian. Las pusieron a nuestro alrededor y le dio algo de brillo y magia al lugar. Cathy regreso a su posición inicial, junto a mis pezones y los lamio. Que maravillosa lengua tenia. Brindaban una calma, una calidez casi indescriptibles. Como me gustaría que estuviera haciendo lo mismo con mi clítoris. Arqueo la espalda y puso entre sus manos un poco de lubricante. Por el olor afrutado juraría que es el de fresa-kiwi de la marca wet. El mismo que uso yo cuando estoy en casa sin nada que hacer. Untándolo entre sus manos se dirigió al miembro de Diego sacándolo de mí. Se lo unto y unto un poco también en mi ano. <> pensé. Desde que soy sexualmente activa, mi sueño o fantasía es hacerlo con dos hombres perforando mis dos entradas, por fin lo tendría. Acomodó su miembro lubricado en mi culo y diego comenzó lentamente a avanzar. No puede ser, como dolía. Al gritar histérica por el dolor Cathy me besó. Que beso. Los hombres generalmente sacan la lengua para llenarte toda de baba y pasear de aquí para allá su lengua, pero ella no. Me besó tan tiernamente, tan delicada, movía sus labios junto a los míos, mordía mi labio inferior, jalándolo suavemente, haciendo círculos con el, pasando su lengua por el contorno de mis labios como si fuera un plumón dibujando. Me relaje y todo el miembro me penetró. Relajada entraba tan fácil, que tonta eh de ver parecido. Daniel mas excitado comenzó a lamerme el coño como si fuera una tutsi pop. Agarro su falo prominente, se inclino hacia mí, me besó y comenzó a empujar por mi otro orificio. Lo recibía toda. Su envergadura me hizo lanzar un quejido de placer. Los dos comenzaron a moverse al mismo ritmo. "WE ARE THE NOBODIESSS WANNA BE SOME BODIESSS…” se escuchaba de fondo. Daniel y yo nos quedamos quietos. Nos miramos. Era nuestra canción. La misma que escuchábamos cuando lo hacíamos en su casa hace años. Comenzamos a besarnos de una manera desenfrenada y el arremetía con más fiereza mi interior. Marilyn tenia razon “TODAY I`M DIRTY, I WANT TO BE PRETTY…” y era cierto hoy me sentia sucia. Como una prostituta. Me encantaba.
-AAHAHA ME VENGOOOO AAAHHHHH- exhaló Diego al instante en que su esperma recorría mis intestinos.
- AAAHHHHH – también Daniel. Que delicioso fue todo aquello.
Se separaron de mí lentamente.
No nos habíamos percatado que Nelson, Chris y Cathy no estaban. Echamos un reojo al salón y ahí estaban, casi en la misma posición en la que me encontraba pero en el sofá. Nelson abajo, arremetiendo contra su culo, ella y Chris profiriéndose un beso que no parecía acabar mientras su gemelo la penetraba.
Me desataron por fin. Ellos notaron que ya habíamos acabado. Chris se separo de su gemela y corrió hasta donde estaba. Me jaló del cabello tal y como me gusta, metiendo una mano por debajo hasta asir toda la cabellera y jalonearlo levemente.
Me beso, casi igual que su hermana pero más brutal. Era delicioso, mientras una descarga se generaba en mi columna por el tirón. –Ahora si serás mía – me dijo al oído dándome una leve mordida en mi lóbulo haciéndome vibrar más. Me aventó al colchón y me giro de espaldas, instintivamente me acomode en la posición de perrito y me penetro brutalmente. AAAAAAAAAHHHHHHH QUE RICOOOOOOOOO!!!!!! – GRITE.
Seguía con sus embestidas cuando Nelson se colocó frente a mí, alce la vista y di con una pija enorme casi como sus dedos. No aguante mas y se la mame. Parecía una loca, lamiendo por todas partes, sujetándola con mis manos, mientras me percataba que Daniel y Diego hacían lo mismo con Cathy.
Yo seguía mamando felíz, sintiendo las acometidas de Chris por detrás. Lamía, chupaba, estrujaba con mis manos, alzando su miembro para lamelo mejor. Chris le dijo a Nelson que se quitara, que fuera con su hermana, que yo era suya nada más. El se fue, virú en dirección a Chris y le dije – SI, SOY TUYA, HAZME LO QUE TE PLASCA – me dió una bofetada, me agarró del cabello y comenzó a cabalgarme ferozmente. Arquee mi espalda hasta dejar mi trasero en lo alto, en todo su esplendor, me amarre las manos y me poseyó. Que dura estaba y tan grande. Me giró de nuevo, se llevó mis piernas a sus hombros, agarró mi pie, justo donde su hermana horas antes se masturbaba y lo lamió. Me separó las piernas y me penetró de nuevo. Puse mis codos como apoyo, me lleve las manos a las caderas y la subía para sentir toda su anatomía dentro, lo mas dentro que podía llegar. Con una mano le arañaba el pecho y con la otra acariciaba sus huevos. Se inclino a mí, nos fundimos en un solo cuerpo, manteniendo un beso apasionado pero voraz. Me mallugaba el pecho, mordiendo mis pezones y sobándolos como si pensara que no eran reales. Salio y se llevo mi trasero a su pecho con las piernas totalmente estiradas. Se unto un poco de lubricante, se puso de pie y me penetro por el culo. Los dos gemíamos apresurados, completamente extasiados y fuera de si, arremetió lento y cuando por fin estuvo completamente dentro de mi, se movía como una locomotora, sin darme tiempo siquiera de respirar. Sentí su leche bañando mi interior, muy caliente y demasiada, como si en años no la hubiera sacado. Exclamo un gemido largo y profundo de complacencia y se dejo caer a mi lado. Nos abrazamos, gimiendo, sin poder detenernos por el cansancio y la excitación. Levante la vista y sentados en el sillón, estaban en orden Daniel, Cathy y Nelson, ella con sus manos perfectas por la manicura masturbándolos a ambos, Daniel sobándole el pecho maravillosamente grande y Nelson acariciando su vulva con cautela, mirándonos.
-Tengo hambre, que tal si calentamos las sobras – sugirió Cathy levantándose de su sitio, exponiéndonos su bello trasero.
-excelente idea – proferimos todos.
El chef Daniel, en playera y bóxers, salio al jardín para poner el carbón, acompañado de los demás chicos para ayudarle con la carne.
-y si nos metemos a bañar? Me siento toda pegajosa – me susurro Cathy al oído, dando un lengüetazo en mi oreja. – muy buena idea, igual yo – dije.
Me tomo por la mano delicadamente. Cruzamos el pasillo, cogimos unas toallas y nos metimos al baño.
Abrí la regadera para mediar el agua. Entramos. Un vapor calido cubrió el cuarto. Mientras me lavaba el cabello, de frente a las llaves, una mano jabonosa comenzó a lavar mis partes, suavemente, de atrás a adelante, haciendo énfasis en mi punto mas sensible. Otra mano subía por mi vientre hasta llegar a mi pecho. Rodeándolo. Jugueteando con mis nenas, acariciando mis pezones erectos de nuevo. Me quite el cabello de los hombros, exponiéndole mi cuello que comenzó a besar y a lamer mientras el agua caliente caía sobre nosotras. No había tenido la oportunidad de estar con ella. A solas. Con cada mordisco venia un espasmo. Pase una mano hacia atrás para sentir su trasero. Se lo sobaba, se sentía suave y aterciopelado, la otra mano la use para buscar su monte de Venus. A mi me gusta llevarlo depilado, no me gusta la sensación que provee el vello ahí pero el de ella era suave, se sentía como una esponja. Comenzamos a acariciarnos mutuamente hasta que percibí sus gemidos. Me vire hacia ella y la bese. Nos abrazamos, tocando cada parte de nuestros cuerpos. Fundidas en un beso indescriptible, metí uno de mis dedos a su vagina. Estaba de nuevo húmeda y no de agua. Con mi dedo pulgar le acariciaba el clítoris, con dos dedos la masturbaba y con los otros dos tanteaba sus labios vaginales. Puse un dedo en su ano. Ella haciendo lo mismo pero tomándome del cabello. Nos separamos del beso y comenzó a bajar lentamente por mi cuerpo recorriéndolo con su lengua, cada parte por explorar, de vez en cuando echándome una mirada lasciva que me volvía loca y ponía al cien. Jugueteo un rato por mi ombligo hasta que llego a mi monte. Lamia exquisitamente mi punto, yo entrando en un mundo mágico de sensaciones nuevas. Separo mis piernas, metió dos dedos largos y me masturbo hasta sentir un poco de mi viscosidad. Prosiguió con la lengua. Que ávida era en estas prácticas, alzándola lo mas que pudiera para penetrarme, a la vez que con los dientes raspaba un poco mi clítoris. Yo no cabía de gozo, una sensación electrificante recorría mis piernas. Tuve que asirme de la puerta y la pared para no desfallecer. Que magnifica era. Subía una mano hasta alcanzar mi busto, decía que le encantaban mis pezones, yo decía que eran suyos. Su lengua llego hasta mi ano, ahora si me sentía desfallecer. Me giro, separo mi culo con sus manos y con su vivida lengua lo lamio. Yo gritaba eufórica. Desperté de mi sueño al notar que tocaban a la puerta para decir que ya estaba la cena. <> pensé gozosa. Se enjabono un dedo y lo metió. De afuera a dentro con delicadeza pero alcanzando cada punto estratégico que me derretía. Me giro de nuevo, dando besitos a mis partes, subiendo lentamente hasta darme otro beso largo y magnifico en mis labios y con sutileza acabo.
Nos enjabonamos, nos secamos mutuamente y dándonos otro beso, ya arregladas, salimos.
Parecía un buffet la mesa. Servidas unas viandas exquisitas. Arrachera, patatas asadas, chorizo argentino, chistorra y mucho, pero mucho alcohol. Todos estábamos felices, riéndonos de las poses que hicimos, los gemidos que proferimos, los dedos de Nelson. Se percibía el ambiente intimo y de camaradería. Pedí disculpas y me dirigí al baño. Regrese y comprobé que eran las 5 de la mañana <> reflexione emocionada. Nelson convino que era la hora de ir a dormir. Todos asentimos. La casa consta de tres recamaras; el cuarto de Nelson, el de diego y la de invitados donde me quede junto con Cathy, Daniel y Christian en la sala.
-jajajaja que divertido fue todo aquello verdad Cathy??-
-jajajaja si magnifico – agrego.
No teníamos sueños, y jugueteando con nuestras partes debajo de la tanga platicábamos alegremente con unas carcajadas sonoras. Christian abrió la puerta argumentando que no tenia sueño y se acostó entre las dos. Platicando sobre nuestras vidas, el metió una mano debajo de la sabana y la dirigió a mi tanga un poco húmeda, comenzó a sobarme y la moje mas. Cathy se recostó sobre la almohada tullida y se quedo profundamente dormida.
-te gusta cómo te toco??-
-si mucho- le dije casi en un susurro para no despertarla. Seguía tocándome cuando con sus dedos avilés aparto la tanga y masajeo mis labios.
-aaaahhhh que delicia- le dije al oído exhalándole un soplo ligero que lo hizo estremecer. Metió un dedo. me estremecí.
-no te cansas nunca verdad?? Pues yo tampoco- saco la tanga por completo haciéndola volar por los aires, cayendo al suelo. Me masturbo. <> pensé. Suaves como una caricia con una pluma pero ávidos en su interior y largos, muy largos. Gemía lentamente, disfrutando cada entrada y salida. Me abrí de piernas flexionándolas un poco para que llegara a lugares inexplorados. Baje una mano y le agarre el miembro duro, palpitante, cálido y confortable. La movía rítmicamente y bajaba hasta tocarle los huevos, sirviendo como preparaba de nuevo su carga de esperma. No parábamos de gemir, comprobé que Cathy seguía dormida y me levante dispuesta a cabalgarlo. Acomode su fallo en mi entrada y baje lentamente haciendo unos movimientos kegel para aprisionarlo más. Lo metí todo. Comencé a moverme de atrás hacia adelante lentamente, su vello provocaba cosquillas en mi clítoris que me llenaban el cuerpo de placer. Le hice ochos para sentir su madurez por todos lados. Me movía mas rápido de nuevo hacia atrás u hacia adelante, cada vez mas y mas y mas rápido. - AAAAAAAAAHHHHHHHHHHHH!!!!- me desfallecí sobre su cuerpo. Que orgasmo tan maravilloso me provoco, sentía todos mis músculos desguanzados. No podía moverme. Me inclino la cara y me dio un largo beso. Me acomodo a un lado en la postura de cuchara, acaricio mi trasero, tentó mis partes chorreantes de lubricación y penetro. Lo hacía muy despacio. Como si tratara de aminorar mis latidos y devolverlos a su estado normal. Me amaso un seno, aprisionando entre sus dedos mi pezón endurecido. Me giro boca abajo sin dejar de penetrarme y comenzó un violento embiste. Podía sentirlo en todo su esplendor jurando que atravesaría mi garganta. Fortaleció sus arremetidas y derramo su leche caliente sobre mi espalda. Se dejo caer. Sentí su corazón al cien. Su miembro volvió a su posición natural. Me limpio y me abrazo a él, acomodando su cabeza en su pecho, me beso en la frente y nos quedamos dormidos.
-RRRIIINNNGGGG RRRRIIIINNNNGGGGG, SON LAS DIEZ AM- maldito despertador, no dejaba de sonar. Estiré una mano y lo apague. – AAAAHHHHH – dije mientras daba un estirón a todo mi cuerpo aletargado con los ojos cerrados. Que delicia. Sentía todo mi cuerpo acalambrado deliciosamente. Mojado de sudor y lleno de jugos de hombre. Abri los ojos y percatándome de la situación, descubrí que Christian y laura ya no estaban. Me encontraba sola en el cuarto, desnuda entre las sananas empapada en sudor. Me vesti. Me dirigi a la planta baja, estaban desayunando. Pregunte por Christian y Laura. Daniel me comento que se habían marchado por la mañana debido a un compromiso; me embargo un sentimiento de tristeza al no sentir su presencia y ver que se había ido. Pero recordé que había anotado su numero telefónico en el celular. Desayune y después de estar un rato con ellos, regrese a casa. Una vez en mi cama, en mi cabeza no existía otro pensamiento, mas que hablar con Christian; no se si era la grabadora de mi cuarto o el ensordecedor sonido de mis latidos, lo que hacia parecer que el tiempo se había detenido por completo. Me quede así un buen rato, hasta que finalmente tuve el valor para coger el teléfono y llamarle para volverlo a ver…..