jueves, 9 de julio de 2009

LAS MUJERES Y EL SADOMASOQUISMO


Para muchos, se trata de perversión; para otros, de una expresión sana y natural de la sexualidad libre, consensuada y lúdica

En lo aberrante encontramos deleite,
y placer en lo mas detestable" (Charles Baudelaire)

¿Qué pasa cuando ellas buscan una relación de poder al interior de su vida de pareja? ¿Qué ocurre cuando quieren jugar a ser dominantes o sumisas? ¿Qué las hace ser sadomasoquistas? Estamos hablando del poder que se ejerce con el fin de provocar u obtener placer y diversión de manera consentida e intensa: el dominio sexual.

Un estudio reciente reveló que el 19 por ciento de las mujeres y el 54 por ciento de los hombres tienen, por lo menos, una fantasía sexual al día, es decir, un momento imaginario, que no existe y muchos desearían que sucediera aunque pocas veces se atreverían a ponerlo en práctica. Dentro de este grupo de fantasías se encuentra el sadomasoquismo. Para muchos, se trata de perversión; para otros, de una expresión sana y natural de la sexualidad libre, consensuada y lúdica.

Nada mejor que el sadomasoquismo para describir tal poderío al interior de la relación e igualmente la sumisión como parte de un juego de fantasía que enriquezca la vida sexual. Contrario a lo que se pudiera pensar, el sadomasoquismo, de acuerdo con nuestros entrevistados, exalta las cualidades de la pareja, en lugar de disminuirlas.

Muchos deciden llevar su fantasía a la práctica, pero, como en todo, en muchos casos puede que se convierta en un tema peligroso cuando las cosas se toman demasiado en serio y se trasladan a la vida cotidiana, más allá del sexo; donde incluso la lucha por saber quién es el más poderoso nos puede llevar a como estábamos antes: solos.

¿Qué es el masoquismo?

Desde el punto de vista sicológico, el término "masoquismo" define el placer sexual asociado con el deseo de recibir dolor, humillación o dominación. El término fue descrito por el médico alemán Kraft Ebbing, tomándolo del apellido de un profesor de Historia y novelista, el austriaco Von Sacher Masoch, quien escribió varias obras de tono masoquista como "La Venus de las Pieles".

Desde hace unos años la APA (Asociación Americana Psiquiátrica) para nombrar al sadomasoquismo propuso el cambio de "aberración o perversión" al término parafilia porque las primeras se han vuelto muy despectivas.

Las cualidades de la mujer no disminuyen de ninguna manera pues quienes lo practican aseguran que el verdadero SM que se practica sano, seguro y de común acuerdo exalta la equidad, porque cada persona decide si las practica, qué les gusta, con quién y cuándo.

Las mujeres arriba


François Singly, profesor de Ciencias Sociales en la Universidad de la Sorbona, en París, especialista en temas familiares, que publicó su libro "Libres ensemble" (Libres juntos), hizo un estudio sobre el individualismo en las relaciones de pareja basado en los resultados de una encuesta entre jóvenes de edades comprendidas entre 20 y 30 años.

En ésta descubrió que esta forma de poder femenina vista muy claramente en el sadomasoquismo, se practica también de forma velada al interior de las relaciones tradicionales: "Las mujeres no se han limitado a seguir los pasos de los hombres y, sí por una parte han adoptado actitudes masculinas, por el otro han ido imponiendo un modelo de atención al otro, de la afectividad, algo que se da menos en los hombres, que no tienen esa capacidad relacional. Se trata de una recuperación femenina que antes no tenían vida exterior".

La antropóloga Nancy Friday, ha afirmado que su libro revolucionario "El Jardín Secreto" publicado en la década de los 60, causó revuelo por desvelar que las mujeres, sobre todo aquellas dulces y cándidas amas de casa o hasta maestras de kinder tienen fantasías sexuales de toda índole, incluyendo, las de corte sadomasoquista o dominadora, una fantasía con la que la mayoría sueña.

"Quien tiene imaginación tiene lados oscuros"

Hoy en día, el sadomasoquismo ya no es una "aberración sexual" como quizá se entendía hace siglos. Hoy, deberían ser más penados algunos temas como la pedofilia, la zoofilia o la gerontofilia, dice la sexóloga Paulina Millán. Lo más importante en el sadomasoquismo es el respeto por el otro y el uso del cerebro como mayor órgano sexual.

En su libro de memorias "Soy un sueño", Dómina Zara, conocida por ser la reina dominatrix de España, de 45 años de edad, afirma que el dolor ni la humillación son la esencia del sadomasoquismo. "Las personas no vienen a sufrir, vienen a gozar. Cada uno es mundo y cada uno tiene una sensibilidad. Dudo que las personas hagan sólo la postura del misionero y que en momentos privados no tengan fantasías eróticas y morbosas, o lados oscuros. Quien es inteligente tiene imaginación y quien tiene imaginación tiene lados oscuros. Que lo digan o no es una cosa, pero que lo tienen es evidente. Creo que pierde más el que lo reprime, porque va cultivando algo que puede crear una obsesión.

"Hay personas que son castigadas y humilladas por su jefe, su amigo, su hermano a conciencia y es real. Esto es cruel y no el sadomasoquismo, que es un juego pactado. Hay personas que humillan al que tienen debajo y lo pisan de verdad y esa persona está sufriendo. El sado es humano pero la sociedad está deshumanizada. Y las mujeres en vez de unirnos nos estamos desuniendo. Una mujer está en una sex shop y es una puta, en cambio si es un hombre lo tratan de empresario", afirma.

Para la practicante de SM y propietaria de una escuela de BDSM en España, la perversidad es todo aquello que sale de lo normal. "Pero está la perversidad lúdica y la patológica. La segunda es más fácil de encontrar y se esconde tras los escritorios donde se ejerce cierto poder financiero que desencadena el hambre y las guerras, donde la tortura de otro ser humano no es producto de un pacto deseado sino de una salvaje persecución de beneficio económico. En cambio, el sadomasoquismo es lúdico y pactado. Te revelas contra la moral que impera en la sociedad".

¿Qué es el sadismo?

El sadismo es la excitación sexual provocada del hecho o fantasía de someter a otra u otras personas a sufrimiento físico o psicológico.

El sádico por tanto, no sólo obtiene excitación al inflingir dolor físico sino también al humillar, someter y degradar a la persona siempre en un juego sano, seguro y consensuado.

El nombre de sadismo deriva del famoso escritor francés Marqués de Sade.

Algunas prácticas sadomasoquistas:

- Spanking (Acción de infligir dolor en el trasero femenino, con las palmas de las manos o algún otro objeto como una fusta o paleta).

- Bondage (Caracterizado por el uso de ataduras con sogas, aunque también pueden usarse cuerdas, correas, cadenas, esposas de cuero, metal (para el cuello- cintura -dedos manos pies -).

- Esclavitud: Además de la dominación que supone esta práctica sexual, se llega en ocasiones a enjaular desnuda a la persona masoquista.

- Humillación: Por ejemplo ser forzado a arrastrarse y ladrar como un perro o ser sometido a insultos verbales.

- Trumpling: Es la acción de pisar, caminar sobre el cuerpo de otra persona, puede realizarse con el pie desnudo o con tacones altos.

- Velomancia: Es la aplicación de la cera caliente de una vela sobre la piel del otro.

- Trasformismo: Vestir ropa del otro sexo.